El periodo vacacional de Semana Santa es para los salvadoreños una fecha muy calurosa, previo a la temporada lluviosa; sin embargo, los últimols días de marzo han llamado la atención de los expertos debido a que se registraron temperaturas récord en el territorio nacional.
El sábado 23 de marzo, se registró una temperatura máxima de 42.8°C en la estación Cerrón Grande, deacuerdo a la cuenta de Tiempo y Clima de CA en X. Esta sería la temperatura más alta registrada en el país desde los 43.0°C registrados en el Puente Cuscatlán el 21 de marzo de 2007.
Sin embargo, el Ministerio de Medio Ambiente no registra esa temperatura en Cerrón Grande. Según su reporte, ese día la temperatura más alta se registro en la estación Nueva Concepción con 39.8 grados.
Pero estás condiciones climáticas no han sido experimentadas en días aislados, sino de forma consecutiva en todo el territorio, según datos registrados por el Observatorio de Medio Ambiente. Esto ha tenido una tendencia al incremento debido a la poca ventilación y la radiación solar en el territorio.
“La temperatura viene incrementando desde la mitad del siglo anterior, viene para arriba, claro viene en forma caótica (puede experimentar escaladas o precipitaciones), pero la tendencia es alcista”, explicó el medioambientalista Ricardo Navarro, a este medio.
Los días se vuelven más largos en esta época ¿Porqué ocurre esto?
Navarro, presidente del Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada “Amigos de la Tierra” (CESTA), explicó que en 2015 organismos internacionales, jefes de Estado y ministros de Ambiente se reunieron en París. Acordaron que iban a hacer todo lo posible para que la temperatura no subiera más de 1.5°C con respecto a los valores preindustriales, pero en 2023 la temperatura llegó a 1.48°C sobre esos límites.
“Si nosotros vemos los últimos 12 meses, la temperatura promedio del planeta llegó a 1.56°C, quiere decir que ya llegamos a lo que habíamos dicho que íbamos a hacer lo posible para no llegar, todo indica que 2024 va para arriba”, expresó.
Según el ambientalista, esto no significa que las temperaturas se estanquen: “Puede ser que en 2025, 2026 o 2027 la temperatura baje”, pero a finales de la década el comportamiento será solo en aumento.
Navarro detalló que el incremento de las temperaturas corresponde a la producción de gases invernadero, que son los que generan el calentamiento, sumado a la tala de árboles que no permite procesar el dióxido de carbono.
“Cuando tiene todas esas causas es de esperar que la temperatura aumente y lo grave de este año es que subió considerablemente”, agregó el ambientalista, para quien esta situación no solo incrementa los niveles de la temperatura sino también los extremos climáticos.
El panorama general indica que el impacto de las sequías, temporales y huracanes tendrá más fuerza.
Navarro también argumentó: “Este año 2023 ha sido el más cálido desde que se tienen registros. Estamos hablando de los últimos 170 años”, argumentando que “es una lástima que no se le dedique el esfuerzo necesario al cuidado del medio ambiente”.
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“Alta probabilidad” que 2024 sea el año más cálido de la historia
Ante este panorama poco alentador la Organización de las Naciones Unidas (ONU) indicó que existía una “alta probabilidad” de que 2024 sea el año más cálido desde que hay registros, después de que el decenio finalizado en 2023 rompiera un récord de calor que empuja al planeta “al borde del abismo”, alertó este martes la ONU.
Un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirmó los datos preliminares que muestran que en 2023 se registraron niveles de calor sin precedentes desde que hay registros.
Además la agencia de la ONU, con sede en Ginebra, señaló que 2023 fue el más cálido desde que comenzaron las mediciones, debido a que varios de los récords a nivel de gases de efecto invernadero, las temperaturas en superficie, la temperatura y el aumento de nivel del mar y el retroceso de los glaciares.
“No podemos decirlo con certeza” pero “diría que hay una alta probabilidad que 2024 vuelva a batir el récord de 2023”, declaró Omar Baddour, encargado de monitoreo del clima de la OMM.