Gobierno de Bukele ha armado una máquina de desinformación, propaganda y ataque a críticos

El pago a personas influyentes y la creación de granjas de troles para propagar de forma masiva mensajes a favor del gobierno son dos herramientas que el presidente Nayib Bukele utiliza como parte de su maquinaria de propaganda, señala una investigación de la agencia Reuters, difundida esta semana.

El informe revela que las personas influyentes y las granjas de troles, además, son utilizadas para atacar a quienes critican sus políticas gubernamentales y para socavar la institucionalidad democrática.

“El presidente Nayib Bukele ha construido un gigante de las comunicaciones en El Salvador. Su motor: troles de internet pagados, cuyos ataques virtuales están poniendo en peligro a periodistas y opositores políticos”, revela una investigación de la periodista Sarah Kinosian, publicada este martes por dicha agencia.

Troles pagados

Kinosian asegura que entrevistó a tres exempleados que afirmaron haber sido parte de las granjas de troles secretas con las que el gobierno manipula el discurso político. Uno de ellos aseguró que firmó un contrato por $600 mensuales como salario, sin saber que estaba convirtiéndose en un trol pro Bukele.

“No lo sabía cuando firmé el contrato, pero hice un pacto con el diablo. Me convertí en un troll pro Bukele”, dijo el exempleado a Reuters.

Desde antes de alcanzar la presidencia, Bukele logró cautivar el voto joven y diversos segmentos con un cuidadoso uso de redes sociales y un manejo “magistral” de su imagen: la de un joven despreocupado e inconforme con la situación. Auxiliado por un amplio aparato de propaganda, logró pintarse como uno más de los salvadoreños molestos con la política tradicional.

VER: Reuters: Troles, propaganda y miedo componen maquinaria mediática de Bukele

Desde esa plataforma, Bukele prometió “medidas enérgicas contra bandas criminales y la corrupción”, detalla la publicación.

Para lograrlo, el gobierno echó mano de expertos en comunicación que crearon una masiva red de “seguidores ficticios de Bukele en las redes sociales para elogiar sus políticas”.

Te puede interesar: Nayib Bukele centró su discurso en seguridad y justificar el régimen de excepción

Y además a Bukele y sus políticas, otro objetivo de las granjas de troles ha sido insultar y atacar a los críticos del mandatario y reportar y presentar quejas contra las publicaciones de esos críticos con el propósito de que las plataformas cerraran sus cuentas.

Funcionarios a la cabeza

Esas actividades eran supervisadas directamente por funcionarios del gobierno de Bukele y solían llevarse a cabo en oficinas de instituciones estatales, reveló Reuters.

Las fuentes dijeron a la agencia de noticias que su jefe inmediato era un ministro que no estaba relacionado con las comunicaciones o los medios estatales.

“Los dos excontratistas dijeron que su oficina inicialmente estaba ubicada en un ministerio del gobierno y luego se mudaron a una casa en un barrio residencial de San Salvador. Ambos dijeron que su jefe era un ministro del gobierno cuya cartera no estaba relacionada con las comunicaciones o los medios estatales”, afirma la investigación.

Entre las tareas de los exempleados, según sus propias revelaciones, estaban crear cuentas falsas de Twitter para a Bukele y Nuevas Ideas con la finalidad de ampliar la difusión de sus mensajes.

Te puede interesar: Departamento de Estado EE.UU.: Intentos de salvadoreños de “influir directamente” en una elección del Congreso son “inaceptables”

La investigación detalla que cerca de 200 cuentas en Twitter fueron creadas entre enero de 2019 y noviembre de 2020 en uno de los centros de troles administrado por uno de los expertos en comunicación entrevistados por Reuters. A inicios de noviembre de 2022, 76 de esas cuentas aún estaban activas.

“Estos trabajadores fueron engranajes en lo que se ha convertido en una poderosa operación de comunicación que ha permitido a Bukele influir en lo que los salvadoreños leen, miran y escuchan sobre su gobierno como ningún líder anterior”, señala la investigación.

Según las personas entrevistadas por Reuters, “la clave de este esfuerzo son docenas de trabajadores de redes sociales pagados que manejan cientos de cuentas y bots anónimos, un megáfono utilizado para amplificar los mensajes del presidente y burlarse de los opositores y periodistas percibidos como hostiles a su administración”.

Medios del gobierno

En ese entramado de desinformación, también juegan un papel importante medios gubernamentales que Bukele ha repotenciado, así como otros que creó, como un periódico, a los cuales ha destinado significativos presupuestos.

“La administración Bukele también ha reforzado los recursos para los medios de comunicación gubernamentales tradicionales, que transmiten un flujo constante de contenido a favor de Bukele a través de prensa escrita, televisión y radio”, señala Reuters al respecto.

Y añade: “La brillante cobertura de los medios nacionales ha ayudado al presidente a consolidar su base de poder y navegar varios escándalos, incluidas las denuncias de corrupción en su administración”.

De acuerdo con el reporte, mientras el gobierno utiliza Twitter como una plataforma para anunciar sus políticas y aparentar cercanía con la ciudadanía, está cerrando el acceso a la información del uso de recursos públicos, así como el desempeño de sus iniciativas. Esto incluye, por ejemplo, recuentos de personas desaparecidas y cuerpos en fosas comunes en momentos que prioriza mediáticamente el combate a la criminalidad.

Según la investigación, grupos de derechos humanos y familiares de las víctimas de la violencia aseguraron que esconder datos sobre desaparecidos en El Salvador tiene como objetivo maquillar las estadísticas delincuenciales, es decir, esconder la realidad.

Washington está preocupado

El reporte de Reuters también revela que el gobierno de los Estados Unidos sigue de cerca la manipulación mediática que Bukele hace con su maquinaria propagandística.

En la investigación se cita un documento interno del Departamento de Estado de los Estados Unidos al que Reuters tuvo acceso y que fue elaborado el pasado febrero.

Según el documento de la institución rectora de la política exterior de EE. UU., la estrategia de Bukele es “inundar a El Salvador con propaganda, demonizar a las instituciones encargadas de desacreditar esa propaganda -la prensa libre y la sociedad civil-, dominar las narrativas públicas y reprimir la disidencia”.

Por otra parte, la investigación afirma que conversó con un alto funcionario estadounidense, quien manifestó que “la estrategia de Bukele es particularmente peligrosa porque ofrece un libro de jugadas coherente para que lo sigan otros aspirantes a autócratas”.

Puntualmente, según Reuters, el funcionario expresó preocupación porque “las estrategias podrían ser utilizadas por otros actores en otras regiones”.

Bukele socava institucionalidad

De acuerdo con Reuters, la forma en que la administración de Bukele está manipulando las comunicaciones para reforzar su control no es muy visible, según el informe del Departamento de Estado.

“El documento dice que el gobierno de Bukele utiliza personas influyentes pagadas y ‘probables granjas de bots’ para tuitear mensajes a favor del gobierno ‘decenas de miles de veces’ sobre un tema determinado, mientras enmascara su origen para ‘crear la apariencia de un auténtico apoyo de base’”, señala la investigación.

Este reportaje de Reuters revela cómo la estrategia mediática del gobierno ha plantado dos ejes. El primero, que busca plantear la idea de un apoyo masivo y multitudinario, que además disuade a los críticos de manifestarse.

El segundo es un eje que busca hostigar, humillar e insultar a periodistas, sociedad civil y los críticos del gobierno para procurar el temor y el silencio de estos.