El presidente de la República, Nayib Bukele, anunció este jueves 15 de septiembre que buscará la reelección presidencial en febrero de 2024. Esto, en contra de la Constitución de la República.
En su discurso del Día de la Independencia, el mandatario dijo que “el pueblo debe tener el derecho de rechazar o continuar el trabajo” de un gobierno.
Asimismo, el presidente reconoció que este anuncio provocará reacciones en la comunidad internacional, especialmente entre países desarrollados.
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“De seguro más de algún país desarrollado no estará de acuerdo con esta decisión, pero no son ellos los que decidirán, sino el pueblo salvadoreño”, dice Bukele.
Además añadió que “sería una protesta hipócrita porque todos ellos tienen la reelección”.
Sin embargo, no es la comunidad internacional la que prohíbe la reelección en El Salvador, sino la Constitución que el mismo Nayib Bukele prometió cumplir y hacer cumplir el 1 de junio de 2019, cuando asumió el poder. Cuando lo asumió por cinco años “y ni un día más”, como afirma la ley máxima del país.
"Absolutamente predecible. Ese fue siempre el plan original. Hoy surge un nuevo Chávez", expresó José Miguel Vivanco, exdirector para las Américas de Human Rights Watch.
Seis artículos de la Constitución prohíben reelección
La Constitución de la República es clara en al menos seis apartados sobre la prohibición de la reelección presidencial consecutiva.
La alternancia en el poder es, de hecho, un pilar tan fundamental en el sistema jurídico salvadoreño que los constituyentes la establecieron como una “cláusula pétrea”, es decir como una de las disposiciones que no puede ser modificada.
"Como ya se esperaba: el presidente anunció el fraude electoral. Que él se presente como candidato presidencial es, por sí solo, un fraude electoral, pues viola las reglas electorales fijadas en la Constitución: se consolida la dictadura en El Salvador", reaccionó el abogado constitucionalista Enrique Anaya, en un mensaje publicado en Twitter.
Sin embargo, la Sala de lo Constitucional impuesta por la fuerza por el oficialismo en mayo de 2021 emitió en septiembre de ese año una resolución que avala que el presidente pueda presentarse a la reelección. Esto a pesar de la prohibición expresa de la Constitución y a pesar de que un tribunal constitucional no puede modificar ni anular a la misma Constitución.
Pese a todos los frenos que la ley le impone, Bukele anunció este 15 de septiembre que buscará la reelección. Para justificarlo, afirmó que es el pueblo quien debe decidir qué camino quiere seguir y si castiga o premia a un mandatario en las urnas.
“Tiene sentido que el pueblo en elecciones libres pueda rechazar el camino que lleva, pero no tiene sentido que el pueblo no pueda continuar el camino que lleva”, dijo el presidente.
Además añadió que “gracias a la configuración de la nueva institucionalidad democrática de nuestro país, ahora El Salvador lo tiene también (el aval a la reelección)”.
Este marco legal al que se refiere no es más que la consolidación del poder en torno a su figura y la captura de instituciones que deberían ser independientes y apartidarias, precisamente para controlar el ejercicio del poder.
Bukele defiende el golpe a las institucionalidad
Además de anunciar que buscará reelegirse, el presidente defendió nuevamente los golpes que la bancada que él controla han dado a la institucionalidad democrática de El Salvador.
“El pueblo decidió darnos no una mayoría, sino una súper mayoría en la Asamblea Legislativa”, dijo en relación al resultado electoral de 2021, cuando su partido obtuvo dos terceras partes del Congreso.
“Y gracias a esa súper mayoría es que se pudo cambiar al fiscal general anterior y a la anterior Sala de lo Constitucional”, dijo Bukele en relación al golpe dado por sus diputados en su primer día de trabajo, el 1 de mayo de 2021.
Además, destacó la remoción de cientos de jueces en virtud de su edad o tiempo de servicio y no de sus capacidades.
A estas decisiones, Bukele las disfrazó de soberanas y mandó un mensaje a la comunidad internacional.
“No obedecimos los dictados internacionales. Ya nos dieron 200 años de recetas y todas fracasaron y ahora por primera vez aplicamos la receta nuestra y ha funcionado”, mencionó.
El discurso del presidente Bukele también giró en torno a la soberanía. Habló de que hay presiones para que el país no sea soberano, pero resaltó que “El Salvador toma sus propias decisiones”.
Esto sucede en medio de cuestionamientos internacionales sobre abusos de poder que ha habido en medio del régimen de excepción y abusos de poder y violaciones de derechos humanos en poco menos de seis meses.
“Por ahí escuché que El Salvador vivía antes en libertad y democracia. No sé en qué país vivían, en el de las élites”, dijo el presidente en su discurso de independencia. “Por primera vez tenemos libertad de verdad”, agregó.
Sin embargo, esto se da en medio de críticas por el debilitamiento de la democracia y concentración de poder por parte del gobierno de Bukele. Esto ha sido señalado por decenas de observadores dentro y fuera del país.
Las palabras del mandatario y su anuncio de reelección fue horas después de un masivo desfile cívico, que reunió a estudiantes, militares y otros grupos, el primero que el gobierno celebra desde el año 2019. Asimismo, las palabras de Bukele llegaron poco después de que miles de salvadoreños salieran a las calles a protestar contra los abusos de poder y violaciones a derechos humanos durante el régimen de excepción.