María Teresa Martínez de Sibrián, de 56 años, fue asesinada ayer, en su vivienda, en el cantón El Sitio, municipio de Nueva Trinidad, departamento de Chalatenango. La policía ha reportado la captura de José Marcelo Sibrián, como sospechoso del feminicidio.
La versión policial es que Sibrián, compañero de vida de María Teresa, la asesinó asfixiándola. En su reporte estadístico de homicidios diarios, la PNC informó el crimen cometido en Nueva Trinidad: Se trata de una mujer que fue asfixiada por su compañero de vida. El crimen ya fue resuelto con la captura del homicida”, dijo la policía en Twitter.
Sin embargo, familiares de la víctima dijeron a El Diario de Hoy que esperan que las autoridades hagan bien su trabajo y mediante investigaciones, capturen a los verdaderos responsables del crimen.
María Teresa fue una lideresa comunal en su municipio, Nueva Trinidad. Entre el 2009 y el 2012 fue parte del concejo municipal, desempeñando el cargo de síndica, según documentos del Tribunal Supremo Electoral. De 2012 a 2015 fue regidora suplente.
De acuerdo con versiones familiares, el feminicidio fue cometido el jueves anterior, entre las 8:00 y 10:30 a.m.
“Las personas (que cometieron el crimen) llegaron y se aprovecharon de la humildad de una gran persona; ella te entendía la mano como se pudiera. Era muy luchadora; le robaron dinero. Una camioneta azul rondó por la zona de la casa del corral donde ella había ordeñado”, comentó un familiar de la víctima.
Según familiares de María Teresa, por el momento han sabido que un hombre y una mujer llegaron a la casa de la víctima, posiblemente con la excusa de comprar lácteos. Esas personas fueron vistas entre la vivienda y el corral, donde la mujer mantenía sus vacas que ordeñaba todas las mañanas.
En cuanto a la captura reportada por la policía, los familiares no creen que él haya participado en el feminicidio, pues si bien no había buenas relaciones entre ambos, él es una persona no vidente. Tal es la afirmación de parientes cercanos tanto de la víctima como del capturado.
De acuerdo con un hijo de María Teresa, su madre fue torturada. El cuerpo estaba amarrado; la asfixiaron.
“Ella nos sacó adelante haciendo de mamá y papá; ella trabajó muchísimo pero se sentía orgullosa por los logros que estamos teniendo los hijos. Es duro porque la vida nos dará un gran giro a los hijos”, afirmó Juan Sibrián.
De acuerdo con Juan, además de ver los logros de sus hijos, María Teresa había alcanzado uno de los sueños que tenía desde que era niña: ella era una mujer ganadera, una pasión que desde niña tuvo mi mamá, comentó, Juan
Nueva Trinidad es uno de los municipios del norte de Chalatenango que por muchos años ha registrado bajos índices de homicidios. La existencia de pandillas en ese y municipios aledaños ha sido muy baja, según fuentes policiales.