El 1 de mayo, en el Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, en Chiapas, el Movimiento Migrante Mesoamericano, junto a representantes de migrantes desaparecidos de los países expulsores: Nicaragua, Honduras y El Salvador, dio a conocer que se ha logrado encontrar a 370 migrantes vivos.
“370 son poquitos, pero si lo comparamos con la eficiencia de la Fiscalía General de la República, somos más eficientes”, señaló la presidenta del Movimiento, Talía Vásquez Alatorre, que reemplaza a la co-fundadora, Marta Sánchez Soler.
Junto a los representantes de los familiares de migrantes desaparecidos, fallecidos y detenidos de Centroamérica, la representante mexicana, Talía Vásquez Alatorre, expuso las demandas de las distintas organizaciones al gobierno mexicano, en el primer día de la caravana de madres centroamericanas en búsqueda en Tapachula, Chiapas.
VER: José Marinero: Autoritarismo también cierra oportunidades a la población y expulsa a la gente
“Estamos retomando el movimiento y es también un renacer del movimiento.”. dijo Alatorre, nueva presidenta de la organización, en sustitución de la renombrada Marta Sánchez Soler, co-fundadora del movimiento, en cuyo honor se dedica la realización de la XVI caravana de Madres de Migrantes desaparecidos y desaparecidos 2022.
Alatorre comunicó a las madres, los padres y hermanos centroamericanos que llegaron a Tapachula una noticia esperanzadora. Se trata de la aprobación del senado mexicano de la creación del Instituto de Identificación Humana, donde se crearán expedientes biométricos en un centro que agilizará los avances en las investigaciones y solicitudes de información.
“Para nosotros eso es un paso importante. Poder decir estas son sus historias, estos son sus padres, estos son sus orígenes y que nos sea más fácil buscar. Y así, en la caravana de 2023, tengan mejores resultados”, señaló.
Obed Carrasco, de Honduras, sustituye en el viaje de la caravana a su madre. Es su primera caravana y expresó las demandas de las madres hondureñas. “Su hijo cumplió su condena y no se lo quieren soltar”, “Queremos preguntar ¿Qué está pasando? ¿Por qué no hay libertad para esos migrantes que injustamente están siendo encarcelados?”, preguntó Obed.
Otra preocupación para las madres hondureñas son las masacres de migrantes. “Detrás de mí, hay muchas madres clamando por los derechos de estos migrantes, por la libertad y por saber dónde están sus familiares” expresó Obed.
La representante de El Salvador, Blanca Areli Gómez, se unió a las exigencias de la caravana hondureña sobre la búsqueda con énfasis en las cárceles.
“Necesitamos que principalmente el gobierno de México cumpla sus promesas. Le exigimos que busque a los culpables de todas las masacres. Hay tanta madre que ha quedado en nuestros países esperando cuerpos, esperando los huesitos de sus hijos” externó.
CONTENIDO RELACIONADO: Estados Unidos ha deportado a más de 3,000 salvadoreños desde octubre de 2021
Su hijo desapareció en 2010 y su hermano en 2013.
“¿Dónde están nuestras hijas?¿Dónde están nuestros hijos? Es lo que nosotras exigimos. Eso queremos saber”.
Gómez lamentó que los años y los gobiernos pasan y los familiares siguen enfocando sus esfuerzos hacia la búsqueda dentro de las cárceles.
“Con la pandemia, quizás pensaron, bueno, ya se fueron las madres, ya no van a venir. Pero no, no nos hemos ido. Aquí estamos de vuelta y si nos echan volvemos a regresar”, frase que arrancó los aplausos de los asistentes a la conferencia.
Los migrantes suelen alterar su información de origen y su identidad con la intención de no quedar tan lejos del país de destino. Esto sucede, según Gómez, porque no confían en el gobierno mexicano.
“Nosotros no dormimos bien porque no sabemos qué pasó con nuestros familiares”, por lo que invitaron al Movimiento Migrante Mesoamericano a incidir en la creación de un comité de Derechos humanos que se integre con familiares de cada país y abogados que les ayuden a defender a sus hijos.
Por Guatemala habló María Hernández Torres y expresó al Movimiento la oportunidad de obtener mejor información o pista de los desaparecidos de familiares que no pueden viajar. “Muchas veces hay madres y padres que mueren sin saber dónde están sus hijos”, recordó.