Eneida Abarca, madre de Carlos Ernesto Santos Abarca, desaparecido el 1 de enero de 2022, insiste en la urgencia de aprobar una ley de búsqueda de personas desaparecidas en El Salvador. A tres años del día en que su hijo fue visto por última vez, la búsqueda de su hijo sigue siendo un camino lleno de incertidumbre y dolor por falta de respuestas.
"La Constitución dice que tengo derecho a la información. La ciudadanía debe saber que todos los desaparecidos tienen derecho a ser buscados. Es un mandato constitucional que el Estado no está cumpliendo", señala Eneida Abarca, en una entrevista esta mañana en la radio YSUCA.
#LaEntrevistaYSUCA | "Tendrían que aprobar una ley de búsqueda de personas desaparecidas", expresa Eneida Abarca, madre del joven desaparecido Carlos Santos Abarca. pic.twitter.com/9uLOSb8Vek
— Radio YSUCA 91.7 FM (@ysuca91siete) January 7, 2025
Carlos desapareció mientras corría cerca del parque Lito Barrientos, en San Salvador. Vestía un pants azul, zapatos café y llevaba una botella de agua. Desde entonces, las instituciones encargadas de investigar no han dado respuestas claras a la familia. "Necesitamos saber cuáles son las líneas de investigación. Ese es mi derecho", enfatiza Abarca, quien ha presentado denuncias a la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) con el apoyo de Fespad, pero afirma que aún no recibe ninguna respuesta.
Eneida Abarca recalca que el Estado tiene el deber de buscar y encontrar a los desaparecidos, sin importar el tiempo que haya transcurrido. "El tema de desapariciones no tiene bandera política", afirma con determinación.
En diciembre de 2024, Abarca participó en la protesta "Navidad Negra", organizada en el Monumento a la Constitución, para exigir el cumplimiento de derechos fundamentales como la verdad y la justicia. Portando carteles con el rostro de su hijo, Abarca se unió a otras voces que reclaman atención ante la indiferencia de las autoridades.
La madre ya había pedido respuestas a la Fiscalía General de la República. "Han pasado 27 meses y no tenemos avances sobre las peticiones de información que hemos realizado. Es un dolor que no cesa", expresa.
La falta de una ley específica para la búsqueda de personas desaparecidas en El Salvador deja a muchas familias en un limbo legal y emocional. "Yo tengo una fuerte carga emocional", concluye Eneida Abarca.