La planta de tratamiento de las aguas residuales del parque municipal de La Familia, en La Unión, colapsó las últimas semanas de mayo debido a los daños en las tres bombas que son parte del sistema que ayudan a evacuar todas las aguas sucias de la fosa séptica y luego son expulsadas a la bahía, confirmaron encargados del área.
De acuerdo con los arrendatarios de los locales donde funcionan los restaurantes, el sector está enfrentando reducción en sus ventas porque durante dos semanas no se usaban los servicios sanitarios del parque; eso provocó que muchos de sus clientes y turistas reclamaban y tomaban la decisión de retirarse.
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La bomba encargada de la fosa séptica donde descargan las aguas sucias de los servicios sanitarios que están en uso para el público y de los baños de cada uno de los restaurantes; trabajaba cada dos minutos pero de ese tiempo solo lograba succionar 30 segundos los desechos.
A partir del 13 de junio, la medida de emergencias que están haciendo los encargados del parque, es utilizar cada 48 horas una máquina achicadora para extraer de la fosa todas las aguas sucias de los servicios sanitarios y de los locales, para trasladarla a las cajas donde la planta hace el tratamiento de descontaminación y luego el agua es vertida en la bahía, aseguró Héctor Umaña, encargado del parque de La Familia.
Según Umaña, en esas dos semanas donde se dio el colapso de la planta, encontraron que la caja grande del pozo de la trampa grasa rebasó todas las aguas grises, “rebalsaron, eran aguas grises, pero recordemos que aunque sea eso, tiene cierta fetidez porque son del uso del lavado del área de cocina de los restaurantes”.
A dos de las tres bombas, les cambiaron algunas piezas, el costo económico que pagaron fue con sus propios recursos tanto del encargado del parque y de la planta de tratamiento, pero los equipos no lograron funcionar, lamentaron los trabajadores.
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“Desde el 2015 que construyeron el parque, esas bombas no han recibido el mantenimiento preventivo; ya le informé del problema al alcalde donde se le solicitó que es urgente comprar nuevas bombas, pero él dijo que harían lo posible de repararlas”, agregó Umaña, encargado del parque.
El 8 de junio, durante entrevista, el alcalde Óscar Parada manifestó que tenía conocimiento que se estaban verificando todas las bombas y que los técnicos de la municipalidad se encargaron de la reparación.
“Yo lo que les decía a los encargados, que si es necesario la sustitución les pedí que me lo hicieran llegar para aprobar las compras de lo que sea necesario para las reparaciones”.
“Siempre ha habido un mantenimiento preventivo y correctivo al igual que los sistemas de agua potable”, agregó el edil.
Algunos dueños de los establecimiento de comida, manifestaron que los turistas o clientes cuando quieren hacer uso de los servicios sanitarios y se encuentran de que hay días que no están funcionando, lo que hacen es retirarse, no consume nada y eso para el sector son pérdidas económicas.
“Hemos tenido mesas hasta con 12 clientes y cuando se van para los baños y se dan cuenta de que no están en uso, la gente se molesta, nos dejan con los pedidos en proceso y se van; eso son pérdidas económicas para todos los que aquí tenemos restaurantes”, agregó uno de los afectados.
“Llegué al parque a finales de mayo, quisimos usar los servicios y la encargada nos dijo que estaban fuera de servicio porque había unos problemas con una planta; eso es de lamentar del descuido que la alcaldía tiene todos los espacios públicos”, Andrea Mejía, turista.
Fuentes extraoficiales del Sistema Básico de Salud Integral (SIBASI) de La Unión, manifestaron que los técnicos de Saneamiento Ambiental hicieron recomendaciones por dos problemas que encontraron en el parque uno por la acumulación de la basura y la otra debido al mal funcionamiento de la planta de tratamiento de las aguas residuales.