“Miente el ministro, aquí donde funcionó el penal de La Unión nunca fue una escuela de niños, mejor que venga a explicarnos para cuando hará un centro cultural, el que prometió cuando vino a demoler el penal”, dice María Ángela Salmerón.
Durante una entrevista en el espacio de Diálogo 21 con Ernesto López, el ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, dijo que antes las escuelas del país las convertían en cárceles.
“Por ejemplo, en La Unión, donde había un centro escolar en la zona urbana construyeron un centro penitenciario, llevaron reos donde se educaba a la niñez”, agregó el ministro.
“Nosotros llegamos al Centro Penal de La Unión, ahí lo que había era una escuela, eso es lo que hacían antes, las escuelas de nuestro país las convertían en cárceles”, expresó el ministro Rodríguez.
Las reacciones en redes sociales de los unionenses no se hicieron esperar ante las declaraciones del funcionario: hubo quienes lo trataron de "mentiroso", porque nunca el penal había funcionado como una escuela para niños.
“Esa parte de la historia de mi pueblo no me la podía, 60 años tengo pensando que ahí siempre fue un penal porque esa es la verdad, un ciudadano donó el terreno para que construyeran el penal, jamás fue un centro escolar de niños”, lamenta Josué Rodríguez.
De acuerdo con registros del Ministerio de Seguridad Pública, a través de la Dirección General de Centros Penales, el Centro Preventivo de La Unión, fue construido en 1960, en la colonia Santa Mónica, en el municipio de Conchagua, departamento de La Unión.
El penal fue cerrado en el 2020, los reos que estaban a la espera de una sentencia o recobrar su libertad, fueron enviados a diferentes penales, luego en junio de 2021 el Ministerio de Obras Públicas demolió las instalaciones con la promesa de que en el terreno se construiría un centro cultura para beneficiar a las comunidades de La Unión.
El 7 de junio de 2021, durante la visita en la que ministro Romeo Rodríguez verificó el avance de los trabajos de demolición, en declaraciones a los periodistas, dijo que posteriormente se construirían las instalaciones de un centro de capacitación y formación para el desarrollo de jóvenes.
Según fuentes extraoficiales de Centros Penales, eran los mismos privados de libertad quienes recibían clases como parte de los programas de reinserción, pues internamente se tenía un área que funcionaba como una escuela desde primer a noveno grado; pero para los reos, también se daban algunos talleres de manualidades y de cocina.
Los residentes de la colonia Santa Mónica y los alrededores, manifestaron que la comunidad continúa a la espera de que el gobierno cumpla con la obra que llegaron a ofrecer.