En el sitio donde fue asesinado San Romero hace 43 años y hablando en nombre de la Iglesia Católica salvadoreña, el sacerdote y teólogo Juan Vicente Chopín llamó al gobierno a liberar a los inocentes capturados durante el régimen de excepción.
“Pedimos al Estado salvadoreño, a la Fiscalía e instituciones responsables de la seguridad, que se liberen a las personas capturadas injustamente en la aplicación del régimen de excepción”, declaró el padre Chopín en la misa que ofició en memoria del Arzobispo Mártir.
Además llamó a la jerarquía de la Iglesia a pronunciarse en favor de los inocentes detenidos.
“Pedimos a nuestra jerarquía católica a que se pronuncie con claridad a favor de las víctimas injustamente capturadas y que ya no tengan una actitud pasiva en la que se les diga a los familiares de los capturados que entreguen ese dolor a Cristo y que tengan fe”, dijo el teólogo y catedrático universitario acompañado de otros prelados.
Durante el régimen de excepción que suspende derechos de los salvadoreños, como el debido proceso, el gobierno ha detenido a 66,000 personas acusándolas de ser de pandillas o vinculadas a ellas, pero ha tenido que liberar a 3,300 por no poder probar los cargos. Más de 70 han muerto han muerto en prisión, según organismos humanitarios.
La Procuraduría de los Derechos Humanos tiene 4,000 denuncias de capturas indiscriminadas e ilegales y otros abusos, al tiempo que organismos humanitarios han documentado una cifra similar.
El padre Chopín también se pronunció en contra de la demagogia y populismo en el ejercicio del poder,
así como en contra del aumento al precio de la canasta básica y la destrucción continua de la naturaleza. “Resucitemos con Monseñor Romero, sacudamos la apatía y la superficialidad, superemos el miedo que nos apabulla, entremos en el rol de las mujeres y hombres libres mediante el uso de nuestros derechos, que nada ni nadie nos debe restringir”, dijo el sacerdote en la homilía.
Fe y esperanza en peregrinación
Desde tempranas horas los católicos y seguidores de la causa por la defensa de los derechos del pueblo
a través de la fe promovida por Monseñor Romero asistieron a distintas actividades para recordar la vida, obra y exigir justicia por el asesinato del ahora Santo.
Para los feligreses que acompañaron a la peregrinación que recorrió varias calles de San Salvador hasta llegar al centro histórico, Monseñor Romero no solo intercede por sus peticiones, sino también sigue defendiéndolos con sus palabras grabadas en homilías y les da fuerzas para enfrentar las injusticias.
Abigaíl Funes, quien viajó desde Soyapango para ser parte de las actividades conmemorativas, afirma que el llamado a la unidad es tan vigente como en aquellos años “sus palabras siguen vigentes porque las semillas que somos nosotros las seguimos replicando porque nos dan fuerza”.
Asimismo José Orellana, integrante de una de las comunidades eclesiales de base, dijo que Monseñor dejó planteadas la solidaridad, el respeto y la igualdad como valores para luchar por un nuevo país.
Las mujeres integrantes del Movimiento de Víctimas del régimen de excepción formaron parte de la peregrinación. “Estamos aquí porque necesitamos que nos escuchen, las instituciones públicas no hacen nada para hacer valer nuestros derechos”, dijo Margarita Pérez.
En la cripta de la Catedral, donde se encuentran los restos de Oscar Romero, fieles llegaron durante todo el día a ofrecer rezos, flores y música como agradecimiento.
Una de ellas fue doña Edelmira Orellana, que llegó desde la colonia Zacamil de Mejicanos, quien llevó un parlante para que sonara el corrido de Monseñor Romero interpretado por Los Torogoces de Morazán. Orellana se hincó al pie de la
tumba del santo y sonó la canción, ella bajó el rostro y sus lágrimas comenzaron a salir, recorriendo sus mejillas que muestran la evidencia de su longevidad: tiene 73 años.
“El pueblo no lo ha olvidado, para mí está vivo, aquí adentro (señalando su corazón)”, dijo Orellana, quien asegura todos los años visita la cripta para estas fechas, pero que siempre se había quedado con el deseo de venerarlo con música.
Asimismo Franklin Quezada, integrante del grupo Yolocamba Ita, quien interpretó canciones para San Romero y los feligreses, reflexionó sobre lo que aprendió del santo: “Su mensaje de reconciliación, amor y de paz es genuino y vigente para retomar, me enseño la verdadera humildad, no la que se aparenta”.
Alejandro Díaz y Ovidio Mauricio, abogados de Tutela Legal, dijeron en conferencia de prensa que el caso del asesinato de Monseñor Romero aún sigue impune, pese a que el Juzgado Cuarto de Instrucción de San Salvador dictó en mayo de 2017 la reapertura del caso y en octubre de 2018 ordenó a la Fiscalía realizar una nueva investigación.