Gobierno sigue con la tendencia de aumento de fondos para Defensa

Las prioridades del presupuesto de la nación para 2025 son los ramos de Educación, Salud, Seguridad y Defensa, según lo expuesto por el ministro de Hacienda, Jerson Posada, el pasado viernes en la Comisión de Hacienda de la Asamblea Legislativa.

Sin embargo, de esas tres áreas, solo la de Defensa tendrá un incremento de recursos para el próximo año, manteniendo la tendencia del gobierno de Nayib Bukele de fortalecer el ramo castrense.

Es decir, el presupuesto de la Defensa Nacional pasó de $145.1 millones en 2019 a una previsión de $314.3 millones para 2025, un incremento del 116.5% en el gobierno de Bukele.

Las asignaciones para los Ministerios de la Defensa Nacional y de Justicia y Seguridad Pública para 2025 suman $903.4 millones, específicamente, $589 millones para Seguridad Pública y $314.3 millones para Defensa, este último con un incremento de $52.9 millones, cuya política es "procurar en todo momento la operatividad de la Fuerza Armada de tal forma que ésta se encuentre en condiciones de cumplir cualquier misión que sea ordenada por el Señor Presidente de la República", según el proyecto presupuestario.

Y es que la Defensa ha tenido una tendencia al alza en sus recursos que ha sido más marcada en tres momentos: en 2020 tuvo un aumento de más del 50% de los fondos, luego para 2022 se le aprobó un incremento del 16.7% aún cuando no había iniciado el régimen de excepción, y para 2025 será del 20.25%, comparado al presupuesto aprobado de 2024.

En el caso del rubro de Seguridad Pública, hay una leve disminución de -2.6% para el presupuesto de 2025, pasando de $604.5 millones a más de $589 millones. Aunque cabe señalar que en este año el presupuesto de seguridad tuvo refuerzos, principalmente en incremento para atención de centros penitenciarios, por lo que el monto modificado para cierre de este año es de $713.8 millones.

Contradicción

Para especialistas de organizaciones sociales y de derechos humanos, el aumento para el rubro Defensa para el próximo año, y en general el crecimiento generalizado de Seguridad y Defensa, contradice al discurso oficial de que el país es el más seguro.

El mismo presidente Bukele aseguró en diferentes espacios internacionales que El Salvador es el país "más seguro del Hemisferio Occidental" y lo atribuye a su política de seguridad, la cual está dictada por el Plan Control Territorial y por el régimen de excepción.

"Hemos podido ver que hay una contradicción respecto del discurso oficial del gobierno que está planteando que el país es más seguro, incluso a nivel regional. En realidad, si el país estuviera en una condición ideal de seguridad los rubros que deberían tener mayor prioridad fueran los de Educación, Salud", dijo Abraham Ábrego, director de Litigio Estratégico de Cristosal.

Agregó que, por el contrario, "el incremento del Ministerio de Defensa que es un área que está vinculada con la actividad militar, no tendría sentido en un país que tiene resuelto su problema de seguridad", expuso.

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Incluso, agrega que la vigencia del régimen de excepción, prorrogado ya 31 veces, también contradice el discurso oficial.

La organización es una de las que ha documentado casos de abusos en el régimen de excepción, desde capturas arbitrarias hasta torturas y muertes en centros penales.

"Entonces creo que es contradictorio estos signos que se están dando y debería analizarse esto, porque en este incremento hay un detrimento de las necesidades que tiene la población salvadoreña sobre todo en temas de educación, salud, en el tema del agro", afirmó Ábrego.

Con el régimen y el Plan Control Territorial, el gobierno ha realizado cercos militares en algunas zonas y mantiene suspendidas garantías constitucionales del derecho de defensa, el plazo máximo de la detención administrativa y la inviolabilidad de la correspondencia y telecomunicaciones.

Manipulación

Marisela Ramírez, del Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular (BRP), califica como una "falta de respecto" de parte del presidente al brindar una información manipulada respecto al tema de seguridad

"En algún momento llegó a decir que El Salvador era un país más seguro del mundo, ahora lo reduce al hemisferio", expuso.

Mientras que indicó que según datos de la Fiscalía General, hay un aumento de denuncias de delitos comparado a 2019. "Y me refiero específicamente que las denuncias que se han aumentado son las agresiones sexuales y la violencia contra las mujeres. Si él dice que es el país más seguro del hemisferio hay que preguntar en cuanto a qué", cuestiona Ramírez.

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Otro aspecto es el aumento de denuncias de personas desaparecidas, de las cuales no hay respuesta estatal a las exigencias de organizaciones.

"Para nosotros y nosotras nos parece incluso contradictorio que él siga pregonando que es el país más seguro del hemisferio y, sin embargo, aumenta la asignación presupuestaria para el Ministerio de Defensa del país", añadió.

Además, señala un retroceso del país en los principios establecidos en los Acuerdos de Paz. "¿Eso es seguridad, vivir en un país bajo represión militar? Que resultado de los Acuerdos de Paz habíamos conquistado en nuestra sociedad salvadoreña limitar el accionar de las fuerzas armadas y no permitir que se inmiscuyeran o que tuvieran incidencia directa en la política de seguridad de la ciudadanía, que las fuerzas armadas son una institución que debería velar en todo caso por amenazas externas hacia el territorio y ha sido totalmente todo lo contrario", comentó.

"Es indignante que se siga manipulando la información y se siga diciendo que somos el país más seguro del hemisferio cuando no tenemos, además de todo lo planteado en términos de seguridad de la ciudadanía en el ámbito delincuencial, no tenemos seguridad en otros ámbitos", enfatizó Ramírez.

Revisión integral

Héctor Carrillo, Director Ejecutivo de FESPAD, considera que es necesario revisar de manera integral los resultados en materia de seguridad.

"Esto implica, por una parte, tener acceso a fuentes de información que permitan contrastar las declaraciones públicas de los funcionarios del gobierno, lo que por hoy no es posible por las restricciones impuestas por lo que no es posible validar esa postura", dijo.

También considera necesaria una perspectiva a mediano y largo plazo sobre la posible evolución del escenario en materia de seguridad. "Por hoy, la FGR sigue reportando en su memoria de labores miles de hechos delictivos y víctimas, de diversos delitos", dijo.

Carrillo valora que el incremento en Defensa refleja un enfoque de seguridad "diseñado para el Estado y sus instituciones y no para las personas y grupos sociales, algo que ya ha demostrado no ser funcional para la transformación social positiva pues se pierde del centro de acción del Estado a la persona humana".

Las prioridades de recursos, según el proyecto presupuestario, son apoyar tareas de seguridad pública ejerciendo mayor control territorial en zonas urbanas y rurales, "mejorando la vigilancia y capacidad de respuesta y evitar la expansión de estructuras criminales" en el país. Y continuar con el equipamiento progresivo de las Unidades Militares.