La Fuerza Armada de El Salvador ha confirmado este sábado la muerte de un soldado, quien se quitó la vida al dispararse con su arma de equipo.
De acuerdo al reporte, el militar fue identificado como Rigoberto A., quien habría cometido el hecho "por razones sentimentales", según publicó la entidad militar en la red social X.
La institución castrense no ha revelado más datos sobre este caso.
Este sería el primer caso de suicidio en 2024 en el que se ve involucrado un efectivo de las fuerzas de seguridad.
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El año pasado, hasta el mes de agosto, el Movimiento de los Trabajadores de la Policía (MTP), reportó que al menos cuatro agentes de la PNC se quitaron la vida.
El MTP ha señalado que a nivel de institución no hay programas efectivos para trabajar en la salud mental del personal policial y militar que está sometido a extensas horas de trabajo y actividades de seguridad permanentes, una situación que se ha intensificado con la aplicación del régimen de excepción, que ya lleva dos años vigente, tras su inicio el 27 de marzo de 2022.
Por su parte Juan Carlos Torres, director de la Maestría en Políticas para Prevención de Violencia Juvenil y de la Cultura de Paz en la Universidad Don Bosco, considera que debe existir por parte del Estado una política que vaya en función de brindar apoyo y atención psicológica a esta población.
"En el régimen de excepción, tenemos la policía y soldados 24/7, acuertelados, permanentemente en actividades. Son personas que tienen familia y que tienen un arma en sus manos y el monopolio del uso de la fuerza. A ellos hay que cuidarles la salud mental. Es un llamado al Gobierno a que cuide la salud mental de policías y soldados", dijo a mediados de marzo a El Diario de Hoy.
En 2022, el MTP denunció que las autoridades no atienden este tema y que por el contrario, ese año, se redujo el número de psicólogos al interior de la institución policial.