En una entrevista en vivo con Frank Rubio, astronauta de ascendencia salvadoreña que se encuentra en la Estación Espacial Internacional, el expiloto declaró sentirse contento de llevar cerca de un mes viviendo en el espacio.
“El segundo día pude ver El Salvador desde la ventana”, reveló Rubio, al tiempo que envió un mensaje a los niños y jóvenes de el país de sus padres y de toda América Latina: “todo es posible”, dijo y destacó que apostar por las nuevas generaciones es lo único que garantizará un futuro próspero para la región.
“Estar aquí es un gran éxito y como un sueño que se ha realizado”, dijo Frank Rubio y describió cómo fueron las primeras horas de su misión en la Estación Espacial Internacional. Dijo que su primer día fue como estar aún en entrenamiento y no se sintió tan bien, pero que, poco a poco, fue acostumbrándose a las condiciones.
"Para mí es un gran orgullo representar nuestra comunidad especialmente el país de mis padres, El Salvador. El segundo día que estuve en la Estación pude ver El Salvador desde la ventana y fue algo muy emocionante sabiendo la historia que mi familia tiene", relató Rubio en entrevistas con diversos medios.
Además, Frank envió, desde el espacio, mensajes para familias hispanas y dijo sentirse orgulloso de ser un latino en la Estación Espacial. “Es un orgullo”, describió el astronauta de ascendencia salvadoreña. “Los latinos hemos hecho muchas grandes cosas”, ser parte de ese aporte de los latinos en el mundo es un legado, describió.
“Si Dios quiere, en los próximos diez años estaremos viviendo en la luna”, predijo Rubio. “La primera noche fue algo muy emocionante, poder llamar a mi esposa y mis hijos y poder saludarlos desde el espacio fue muy importante para mí”, recordó.
Declaró, también que estar sin su familia fue lo más difícil pero que tanto él como sus hijos comprenden la importancia de los avances y estudios que Rubio está realizando en la Estación Espacial, por ejemplo, relacionados al cultivo de vegetales y de generación de alimento para astronautas y viajeros, de cara a cuando esos conocimientos sean utilizados por expediciones interplanetarias.
“Cada día que puedo ver nuestro planeta desde la ventana es muy emocionante”, describe el astronauta y señala que la sensación de cero gravedad será de las cosas que más va a extrañar cuando su misión haya concluido.
La misión de los tres cosmonautas, denominada Soyuz MS-22, continuará en la EEI durante cinco meses más.
Esta es la primera misión espacial de Rubio desde que se convirtió en astronauta en 2017.
De acuerdo con información de la NASA, "se graduó en la Academia Militar de Estados Unidos en West Point y obtuvo el título de doctor en Medicina en la Universidad de Servicios Uniformados de Ciencias de la Salud en Bethesda (Maryland). Antes de asistir a la Facultad de Medicina, sirvió como piloto de helicóptero UH-60 Blackhawk y voló más de 1.100 horas, incluyendo más de 600 horas de combate y peligro inminente limitadas durante los despliegues en Bosnia, Afganistán e Irak".
Rubio es médico de familia y cirujano de vuelo certificado.