La madre de Fernanda Nájera mostró su preocupación debido a que, hasta la mañana de este martes, el personal de la Fiscalía General de la República (FGR) no se ha comunicado para informarle la logística que garantice su presencia virtual en el juicio contra el sospechoso del feminicidio de su hija.
El Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las Mujeres de San Salvador ha programado el juicio contra Michael Alejandro Castillo Murga para el próximo 22 de abril.
Castillo Murga es el principal sospechoso del feminicidio de la joven Melvi Fernanda Nájera Quezada y el homicidio tentado en contra de su propio hijo, de un año siete meses, el cual fue abandonado a la intemperie tras al asesinato de la madre.
Desde el año pasado, la familia de la víctima se encuentra en condición de asilo en una ciudad estadounidense, pero desde entonces, aseguran que el Ministerio Público no ha tenido ninguna comunicación con ellos sobre el avance del caso judicial.
“Yo le pedí un número de teléfono directo a la gente de la Fiscalía cuando veníamos acá, para estar pendiente del caso proceso, pero me dijeron que solo podían dar el número fijo de la Fiscalía, pero ha sido imposible tener comunicación con la fiscal del caso” explica Marielos, la madre de Fernanda.
Fuentes allegadas al caso explicaron que la Fiscalía es la encargada de garantizar la presencia virtual de la madre y del niño en el juicio, como víctimas, pero hasta ahora, todo indica que el ministerio público no ha realizado el petitorio para que ambas víctimas tengan el apoyo del consulado o embajada más cercanos.
Marielos explicó vía telefónica que el consulado más cercano se encuentra aproximadamente a dos horas y media en vehículo, pero cuando faltan menos de ocho días para el juicio, aún se encuentran ante la incertidumbre si el Estado les apoyara en el traslado y si las autoridades correspondientes les garantizaran el derecho a estar en la diligencia judicial de forma virtual.
El juicio contra Castillo Murga estaba programado originalmente para el pasado 14 de febrero, pero fue suspendido por petición de la Fiscalía, argumentando que los fiscales asignados estaban realizando labores en el escrutinio final de las elecciones presidenciales y legislativas.
Sospechoso prófugo
Han pasado cinco años desde el feminicidio de Fernanda, sin embargo, el sospechoso sigue prófugo y sería enjuiciado bajo esa condición.
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A pesar de que se sospecha que se encuentra escondido en Estados Unidos, hasta diciembre de 2022 las autoridades salvadoreñas no habían solicitado su extradición.
En un documento oficial, al que tuvo acceso este periódico, en diciembre de 2022, la Interpol advertía a las autoridades salvadoreñas que la difusión roja no es suficiente para realizar la detención del sospechoso, en caso de ser localizado en territorio estadounidense.
Inicialmente la Fiscalía acusó a cinco personas por el feminicidio, en el proceso judicial, un fiscal confesó que ayudó a encubrir el asesinato, a cambio de que se suspendiera de forma definitiva el proceso en su contra.
La novia del sospechoso, Jacqueline Alejandra Martínez Herrera, fue condenada por su complicidad en el feminicidio, pero no le fue impuesta ninguna pena.
La madre de Michael, Edith del Carmen de Murga fue eximida del proceso porque falleció, mientras que un médico fue absuelto, era acusado por el delito de encubrimiento en el asesinato.
El feminicidio
El 31 de enero de 2019, Melvi Fernanda y su hijo, entonces de un año siete meses, fueron sacados con mentiras de su vivienda por Castillo Murga, padre del niño.
El hombre le había prometido a Fernanda que irían a arreglar los documentos de identidad del niño, pues él hasta ese momento, se había negado a darle el apellido a su hijo. Sin embargo, esa promesa solo era una coartada.
Dos días después, el cadáver de una mujer, con signos de tortura, fue encontrado en una cuneta en la carretera que conecta el municipio de Ataco con Ahuachapán. Se trataba de Fernanda, pero en ese momento el cuerpo sin vida fue levantado por Medicina Legal, como desconocido.
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Un día después, el hijo de Fernanda fue localizado abandonado en medio de un cafetal en el municipio de Ataco. Un grupo de agricultores alertaron a la Policía que habían encontrado al menor desorientado y deshidratado.
Según la acusación del ministerio público, Castillo Murgas atacó a la víctima con arma blanca, luego se dio a la fuga e intentó deshacerse de las evidencias con la colaboración de familiares y personas allegadas.