El reverendo Juan Bueno, reconocido pastor, misionero norteamericano y fundador de los liceos cristianos en el país, falleció este miércoles, según confirmó su familia a través de redes sociales.
Se informó que el reverendo, quien tenía 86 años, se encontraba hospitalizado debido a complicaciones de salud.
“Los planes eran que Juan vendría a casa para ser atendido profesionalmente allí, pero debido a deterioro notable desde anoche, el doctor aconsejó que era lo mejor para él permanecer en el hospital”, detalló la usuaria de Facebook, Cili PB, quien relató que en horas del mediodía “logramos verlo con sus ojitos abiertos, reconociéndonos, un poco consciente. Se ve en paz el hno. Juan. Gracias por su amor y oraciones”.
El espíritu misionero del reverendo Juan Bueno lo trajo a El Salvador en 1961. Durante esta misión dirigida por las Asambleas de Dios, la realidad que atravesaba el país le despertó el deseo de ayudar a niños y jóvenes a través de la educación, dedicando más de 60 años a esta noble tarea.
Fue director de misiones en las Asambleas de Dios desde 1997.
Reverendo Juan Bueno: 60 años trabajando por la educación de El Salvador
La misión de revendo Juan Bueno junto a su esposa, Loida de Bueno, estuvo llena de limitantes fundando el primer Liceo Cristiano “Reverendo Juan Bueno” el 4 de febrero de 1963, con 81 alumnos y varias dificultades para poner en marcha el proyecto, que en la actualidad incluye más de 80 sedes conservando el objetivo de su fundación brindar educación accesible y de calidad a la niñez.
Tras casi 61 años de ese gran paso en la educación salvadoreña, El Salvador ya cuenta con 38 colegios de Liceos Cristianos distribuidos en San Salvador (23), Ahuachapán (3), Santa Ana (3), La Paz (3), Morazán (2), Sonsonate (1), La Libertad (1), San Vicente (1) y San Miguel (1).
En declaraciones brindadas a El Diario de Hoy en 2023, el misionero y su esposa reconocieron que el camino no fue fácil. Ambos llegaron al país cuando eran jóvenes y solo tenían meses de haberse casado. Su misión era estar en el país tres años, pero el corazón y la humildad de las personas hizo que esos tres años se convirtieran en décadas.
“Yo soy fanático de la educación, porque sé que es a través de la educación que se levantan los pueblos. No es que otras cosas no sean importantes, por supuesto, la fe en Jesús es fundamental. Pero la gente, o sea los pueblos, necesitan saber leer para poder progresar”, destacó el misionero en 2023.
