La última reunión de la Comisión de Reformas Electorales y Constitucionales de la Asamblea para abordar el análisis del proyecto de ley de voto electrónico en el exterior fue el 11 de agosto de 2022.
Desde entonces, hace ya casi dos meses en que los diputados de esa comisión legislativa no le han dado trámite a esa normativa que los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE), urgieron desde mayo de este año.
Noel Orellana y Guillermo Wellman, han sido de los magistrados que más han insistido en que el atraso en legislar sobre el mecanismo que se usará para que voten los salvadoreños que residen en el extranjero; pone en riesgo el buen desarrollo del proceso electoral en general.
LEA ADEMÁS: "Nos urge esa ley". TSE propondrá voto postal para los salvadoreños en el exterior
Si bien los parlamentarios de la Comisión de Reformas Electorales se reunieron el 18 y el 25 de agosto, en ambas sesiones tocaron otros puntos.
En 11 de agosto recibieron a una comitiva del Ministerio de Relaciones Exteriores para que dieran sus aportes al estudio de la “Ley Especial para el Ejercicio del Sufragio en el Extranjero”; sin embargo, desde entonces el análisis no ha tenido mayores avances.
Una de las preocupaciones del TSE es que existe una sentencia de la Sala de lo Constitucional que ordena que un año antes de cada elección no se pueden hacer reformas electorales, y siendo que los comicios presidenciales están previstos para el 4 de febrero de 2024, implica que a partir del 4 de febrero de 2023, el TSE ya no podrá hacer modificación alguna al sistema de votación que ya está vigente.
Tomando en cuenta lo anterior, al Tribunal Electoral le restarían cinco meses para adecuar todo lo relativo a la implementación del voto en el exterior, si es que la Asamblea aprueba la normativa en octubre de este año.
Y es el caso que la bancada oficialista promueve el voto electrónico por Internet, un sistema que pone mayor complejidad al voto en el exterior. El mecanismo usado actualmente es el voto postal.
“Nos urge esa ley”, afirmó el magistrado Wellman a mediados de agosto. Ha pasado un mes y medio y la Asamblea sigue sin tener una respuesta a ese llamado de urgencia del TSE.
En entrevista con El Diario de Hoy, el magistrado Wellman manifestó que a finales de agosto presentarían una contrapropuesta a los diputados, que consiste en recomendar el voto postal anticipado en las ciudades de Estados Unidos con mayor población de salvadoreños, tales como New York, California y Texas; así como en Milán, Italia y Australia; sin embargo, tampoco lo hicieron, al menos no públicamente.
Lo último que los diputados de Nuevas Ideas admitieron es que estaban valorando hacer una especie de votación “híbrida”, es decir, combinar el voto postal y presencial en los consulados de El Salvador con el electrónico por Internet.
Raúl Chamagua y Rebeca Santos, ambos del partido oficialista, reconocieron que hay mucha población que tiene años de haberse ido del país que podrían tener dificultades para votar a través de medios electrónicos.
Además, el sistema que el partido oficialista prefiere implica un mayor gasto para el Estado. Según el TSE este no se puede determinar al detalle mientras no se tengan las reglas definidas en una ley que es responsabilidad de la Asamblea aprobar.
TAMBIÉN: Ruth López: El voto en el exterior 2024 "no va a poder ser por internet"
El pasado 30 de septiembre, el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, presentó en la Asamblea el proyecto de presupuesto de la Nación para 2023.
De los pocos detalles que se han conocido, Zelaya no dijo nada del presupuesto que han destinado para la realización de las elecciones de 2024, considerando que en ese año convergen cuatro elecciones: las presidenciales, de diputados de la Asamblea Legislativa, alcaldes y diputados del Parlamento Centroamericano (Parlacen).
Para llevarlas a cabo, los magistrados del Tribunal Electoral afirman que deben contar con la mayor parte de esos fondos el próximo año para echar a andar el Plan General de Elecciones (PLAGEL).
Este plan supone una serie de actividades de logística, adquisición de servicios y contratación de la empresa que procesará los votos, entre otros aspectos que requieren de una gestión anticipada y eficiente para tener elecciones que garanticen transparencia y seguridad en los resultados.
“Estamos ya sobre la marcha, si nosotros no tenemos los recursos necesarios y adecuados y no tenemos la empresa que nos haga el software y el servicio para el voto en el exterior, difícilmente salimos adelante. Se nos hará más difícil buscar la empresa que se haga cargo de la elección y además más cara”, señaló Wellman.