El proyecto 3D MediMakers nace como una alternativa para que estudiantes del área de salud puedan acceder a modelos anatómicos realistas que les permitan facilitar sus procesos de aprendizaje; esta herramienta ha sido desarrollada por alumnos de segundo año del Centro ¡Supérate! Merlet, a través de su feria de tecnología 2024.
Los estudiantes sostienen que en la actualidad aún existen dificultades para adquirir modelos anatómicos en los que se puedan realizar prácticas con recursos visuales interactivos, que verdaderamente proporcionen una experiencia más inmersiva.
Con el firme objetivo de contribuir al desarrollo y aprendizaje, un grupo de estudiantes ha creado una página web desde la cual las personas pueden acceder para ordenar la impresión de los órganos que necesitan. El grupo ha configurado una aplicación para imprimir los órganos en diferentes tamaños, como parte del proceso de experimentación.
“Estos modelos fueron creados desde cero, nuestro equipo se ha encargado de estudiar la anatomía de los órganos para poder incluirlos en un programa llamado Blender para poder imprimirlos”, señaló Alexa Campos, una de las integrantes del grupo y aspirante a estudiar medicina.
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Un órgano, dependiendo de las especificaciones solicitadas, puede tardar entre 20 horas a días en ser modelado por la impresora 3D, programada por los estudiantes.
“Con esto los estudiantes podrán adquirir productos con las especificaciones que ellos requieran: completo, por mitad para analizar su parte interna; nosotros hacemos el modelo y podemos brindar esa facilidad a los estudiantes”, agregó Campos.
Laura Díaz, integrante del equipo, destacó que decidieron innovar utilizando la impresión tridimensional, pues “a través de 3D MediMakers buscamos cubrir las necesidades de los estudiantes de medicina, permitiéndoles familiarizarse con los órganos y practicar cirugías utilizando nuestros modelos. Para desarrollar el proyecto, empleamos herramientas como HTML, Visual Studio Code y DJANGO, además de Blender para los modelos 3D. Fue un desafío, pero logramos adaptarnos y trabajar en equipo, a pesar de tener diferentes formas de abordar los problemas”.
Nueve proyectos fueron presentados durante el cierre de las expoferias, en esta última edición titulada "Society Tech", como parte del proyecto Digital Talent, apoyado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Al menos 49 estudiantes de diferentes municipios de La Libertad y San Salvador participaron en la actividad; quienes cursan segundo año de la beca demostraron los conocimientos adquiridos en lenguajes de programación, inglés y valores, con el objetivo de brindar soluciones innovadoras, capaces de generar un impacto positivo en distintas áreas de la sociedad.
El evento estuvo acompañado por Mary Alice de Frech, presidenta de Fundación Frech; Freddie Frech, presidente de Grupo Merlet; Ricardo Sagrera Bogle, presidente y Fundador del Programa ¡Supérate!, padres de familia, directores, docentes y estudiantes.
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“Nos sentimos profundamente orgullosos de los estudiantes de segundo año, quienes están en la mitad de su recorrido por el programa. Durante este tiempo, han recibido una formación de excelencia conocimientos que hoy se reflejan en el éxito de esta expo de logros. Es un privilegio ver cómo se desenvuelven con tanta confianza, utilizando las herramientas que hemos puesto a su disposición”, dijo la directora del Centro ¡Supérate! Merlet, María Isabel Rivas.
Todas las aplicaciones presentadas responden a una problemática en salud, medio ambiente, educación, economía y movilidad, que fueron los temas abordados por estudiantes del programa, cuyas ideas ofrecen una solución concreta.
¡Supérate! es una plataforma que permite estudiantes de las escuelas públicas acceder a educación técnica de forma gratuita, mientras terminan sus estudios en educación básica y media, por lo que al graduarse de bachillerato también han obtenido diferentes certificaciones en manejo de aplicaciones informáticas y un nivel de inglés casi nativo.
El programa de excelencia académica lleva 20 años desde su fundación en El Salvador por la Fundación Sagrera Palomo e Hilasal, como una iniciativa de inversión social, para brindar a los jóvenes mejores oportunidades de vida.
