El movimiento ciudadano SUMAR sostiene que es pertinente la nulidad de los comicios del pasado 4 de febrero, tras una serie de ilegitimidades e inconsistencias en el proceso electoral.
SUMAR recogió entre la serie de elementos que bastan para dar los nulos los comicios que a la inconstitucional candidatura de la reelección del actual presidente de la República, la manipulación de las reglas electorales y demás aspectos estructurales del fraude, se agregaron un sin número de irregularidades durante la jornada electoral y el escrutinio.
“Vuelven totalmente ilegal e ilegítimo el proceso y sus resultados”, expresó SUMAR a través de un comunicado.
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Tras finalizado el proceso de escrutinio electoral, cuatro partidos solicitaron la nulidad de los comicios. VAMOS, Nuestro Tiempo, ARENA y el FMLN ya presentaron sus escritos.
Para la llegada del día de las elecciones, SUMAR evidenció la falla “catastrófica” del sistema de registro y transmisión de datos y el “desastroso posterior escrutinio”.
SUMAR señaló dentro de las anomalías la toma de recinto en que se realizó el escrutinio (hotel capitalino y gimnasio “Adolfo Pineda”) por el partido Nuevas Ideas y la “nula transparencia” en los resultados preliminares: “Todo aparentemente enfilado en forzar el resultado más cercano al anunciado desde el balcón presidencial”.
Las elecciones pasadas resultaron aún más fraudulentas de lo previsto, según calificó la agrupación de expertos.
SUMAR desde el inicio del proceso electoral señaló inconsistencias en el proceso, pero estas, desembocaron el día de las elecciones y se evidenciaron más en el escrutinio, compartió el grupo de expertos de la sociedad civil.
Además de las anomalías que SUMAR enlistó, el Diario de Hoy recogió testimonios de vigilantes de los partidos políticos durante el escrutinio, quienes señalaban más a medida que avanzaba el escrutinio.
Según las denuncias, votos calificados como nulos por las Juntas Receptoras de Votos eran recalificadas para darlas por válidas y sumarle votos al partido Nuevas Ideas, asimismo, señalaron que por presión de los vigilantes de Nuevas Ideas, algunos digitadores del Tribunal Supremo Electoral (TSE) recalificaron como nulos los votos cruzados para candidaturas opositoras al oficialismo.
Una de las cajas que contenía paquetes electorales venía con una bolsa negra amarrada a la misma, cosa nunca antes vista en los comicios electorales organizados por el TSE.
La multitudinaria vigilancia del partido Nuevas Ideas activaba un “Código Rojo” en el que exigían a los digitadores reiniciar el sistema de escrutinio cuando en casos como San Salvador, había una alta cifra de votos para los contrincantes del partido oficialista.
Falta de competencia
La serie de inconsistencias y anomalías, SUMAR las adjudica a que el Tribunal no mostró competencia ni independencia, y que sus funciones fueron usurpadas por personas integrantes del oficialismo.
Asimismo, destacan que el proceso estuvo lleno de presiones, intimidación y hasta amenazas de detenciones ilegales contra quienes documentaron acciones fraudulentas.