Pese a las constantes denuncias de irregularidades y señalamientos de supuesto "fraude electoral" durante el proceso de elecciones desarrolladas el 4 de febrero, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) confirmó el viernes la reelección de Nayib Bukele y Félix Ulloa, del partido oficialista Nuevas Ideas, por cinco años más, como presidente y vicepresidente de la República.
La fórmula de Nuevas Ideas obtuvo el 82.66% de los votos; 6.25% el FMLN; 5.44%, ARENA; 1.99%, Nuestro Tiempo; 0.72% Fuerza Solidaria; 0.59%, FPS; Fuerza Solidaria con 0.52; votos nulos 1.84%; y abstenciones 0.46%; votos impugnados fueron el 0.05%.
Según el TSE, 5,473,305 personas estaban convocadas a votar dentro del territorio y 741,094 en el exterior, según la residencia de su documento de identidad. De esa población acudieron a votar 3,268,466, es decir, el 52.60% de la población votante.
Lo anterior significa que la fórmula de Nuevas Ideas ganó por 2,701,275 votos, es decir, con el 43.48% del padrón electoral.
“Aquí ha quedo expresada la voluntad del soberano”, dijo la magistrada presidenta del TSE, Dora Esmeralda Martínez.
Según la oposición, sólo se abrieron 30 urnas y se validaron casi todas las actas electorales. El TSE partió de validar el 70.25% de las actas que fueron transmitidas el 4 y 5 de febrero en el sistema que luego falló.
Ahora sólo queda el escrutinio de las elecciones para la Asamblea Legislativa.
El cuestionado camino a los resultados
Para la obtención final de los resultados, las autoridades electorales se dispusieron a abrir el paquete de 30 Juntas Receptoras de Votos. Ocho fueron de San Salvador, trece de La Libertad, cuatro de Santa Ana; una de La Unión y una de La Paz.
Durante el escrutinio de las presidenciales, un grupo de Nuevas Ideas irrumpió en los pasillos de los salones en donde se realizaba y junto a funcionarios de gobierno coreaban el nombre del partido en turno.
Desde el domingo que se llevó a cabo la primera jornada electoral de 2024, la población salvadoreña quedó a la espera de los resultados oficiales, pero comenzó a suceder lo que la oposición llamó “un caos orquestado” en el que hubo suplantaciones de personal capacitado y duplicación y triplicación de resultados hasta suspensión de la conectividad y la energía eléctrica.
No obstante, Bukele se autoproclamó ganador con “más del 85% de los votos” mucho antes de que el TSE recogiera sus resultados preliminares.
Tanto institutos políticos como observadores internacionales han denunciado que durante el desarrollo de las elecciones como durante el escrutinio final se dieron "graves irregularidades", y que no existen garantías de un proceso transparentes y "apegado a derecho".
El exmagistrado del TSE Eugenio Chicas denunció el 8 de febrero en una entrevista matutina, mientras se desarrollaba el conteo a manos de las actas del escrutinio preliminar en un hotel capitalino, que ha existido un fraude y que ha sido estructural.
Para Chicas las anomalías e irregularidades que se han existido durante las elecciones 2024 van más allá de problemas técnicos de transmisión y procesamiento de resultados preliminares y otros factores.
"Para mí, se está calificando como fraudulentas muchas de las irregularidades que hubo el domingo de las elecciones. Pero no se está poniendo atención en que el fraude en esta elección es, y ha habido fraude, y este es estructural”, dijo.
Cambios sin explicación
El Tribunal cambió de modalidad sobre cómo contar los votos por la elección presidencial debido al caos en la noche del domingo.
El lunes, en cadena nacional, la presidenta Dora Martínez dijo que abriría el 30 % de los paquetes electorales que las juntas receptoras de votos no transmitieron. Sin embargo, en la práctica solo menos del 2% fue bajo esa modalidad; el resto fue solo con actas.
El viernes 9 de febrero, el magistrado Noel Orellana aseguró que fue acordado así con la Fiscalía General de la República.
“Están tratando de confundir a la gente planteando decisiones cuando estamos frente a un fraude estructural. Esa anomalía es una más, a parte de las que iniciaron el domingo cuando se suplantaron a más de 80% de las JRV”, reaccionó el candidato de Nuestro Tiempo, Héctor Silva, postura con la que concuerdan los demás actores políticos de oposición y de la sociedad civil consultados por El Diario de Hoy.
Mientras que el Código Electoral establece que cada JRV está obligada a a dar una copia a cada uno de los vigilantes de los partidos que hayan asistido al acto, firmadas y selladas.
“El acta levantada por la JRV referente al escrutinio será la única que tendrá validez para establecer el resultado”, reza el artículo 211. Sin embargo, por ser páginas a mano que avalaron los de las mesas, irrumpidas por Nuevas Ideas, se terminaron sin evaluar en las papeletas.
Votos impugnados
El TSE había estimado el pasado lunes que les tomaría dos semanas tener los resultados oficiales de las elecciones. Aún con el margen de tiempo, no tomó en cuenta evaluar los votos impugnados de cada JRV.
Vale mencionar que al menos el 80% de las JRV se vieron alteradas por la intromisión de militantes de Nuevas Ideas. El TSE calló.
Videos y fotografías evidenciaron que se dieron por válidos votos que eran nulos y otros que necesitaban impugnarse, a fin de favorecer a la candidatura cian.
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A la hora del escrutinio, vigilantes denunciaron que en la JRV 3704 de Quezaltepeque casi la totalidad de papeletas aparecieron inutilizadas, pero en el acta aparecía la mayoría de votos para Nuevas Ideas.
Asimismo, el candidato Irving Soto, del FMLN, aseguró que se encontraron con una “gran serie de inconsistencias”, como con una JRV de Ciudad Arce en la que habían “352 papeletas que no existen por ser los sobrantes”.
Ante estas y otras “irregularidades” en el sistema de votos, el partido ARENA y Nuestro Tiempo consideraron necesario que el Tribunal les permitiera acceder al padrón de firmas del día de las elecciones; buscaban verificar que el total de firmas coincidiera con el de las papeletas votadas.
Prepotencia
Las personas que acompañaron el proceso de escrutinio como vigilancia partidaria, así como periodistas, resintieron el acoso y amedrentación de los militantes de Nuevas Ideas durante el proceso.
“El miedo se les nota en cada acción de prepotencia, de vulgaridad y de matonería que hemos visto en este escrutinio. Sin duda Nuevas Ideas ha dejado más que registrado de que son vulgares que son patanes, que son misóginos, lo hemos visto con funcionarios y con ministros, con gente que porque usa un chaleco de un color se cree mejor que otros; esos tiempos de finca ya pasó”, señaló la secretaria de VAMOS, Cesia Rivas.
Además, el candidato de Nuestro Tiempo, Ramiro Navas, denunció que el partido Nuevas Ideas no dejó de irrespetar el protocolo de escrutinio determinado por el TSE en el que determina que la vigilancia partidaria se mantiene tras la mesa de quienes realizan el proceso.
En cambio, los militantes cian se negaron a abandonar el puesto y al final, el Tribunal, sumiso al comportamiento de los militantes les permitió a ellos y al resto de partidos, conformar la mesa de evaluación y escrutinio.