Miles de habitantes del cantón Hacienda La Labor en el municipio de Ahuachapán afirman estar molestos por la lentitud con que una empresa contratada por la Dirección de Obras Municipales (DOM) ejecuta la reconstrucción de 4.4 kilómetros de calle que iniciaron en febrero y que debieron terminar en septiembre de este año.
Parte de esa calle fue pavimentada entre 2019 y el primer trimestre de 2020, según consta en boletines informativos del Ministerio de Obras Públicas (MOP).
En el segundo semestre de 2019 el MOP pavimentó 1.1 kilómetros de esa calle a un costo de $97,000, y en una segunda etapa, a principios de 2020, pavimentaron 1.8 km, lo cual costó $188,000, de acuerdo con documentos del MOP.
La pavimentación de 2.9 kilómetros costaron en conjunto $285,000; sin embargo, de acuerdo con lugareños, en febrero de esta año, cuando comenzaron la reconstrucción de la calle, ese pavimento fue destruido para comenzar el proyecto de 4.4 kilómetros (1.5 km más), que costará varios millones de dólares.
De acuerdo con rótulos colocados en el caserío donde era el casco de la hacienda La Labor, la obra costará $8.3 millones y el plazo de ejecución era de ocho meses.
Según los vecinos del cantón, las obras comenzaron en febrero de este año, por lo cual los ocho meses se cumplieron en septiembre. Al comentar sobre el proyecto, los pobladores no disimulan su frustración y desesperanza de que la obra sea ejecutada pronto.
Las fuentes afirmaron que desconocen si la DOM otorgó una prórroga y el plazo de la misma; es más, el secretismo sobre la ejecución de la obra es tal que en el rótulo no se indica el nombre de la empresa que la ejecuta.
“Solo sabemos que es una empresa chapina (guatemalteca); lo sabemos por las placas de los carros y camiones que vienen a trabajar. Aquí nadie sabe el nombre de la empresa”, afirmó una lugareña.
El jueves anterior, El Diario de Hoy gestionó la versión oficial de la DOM sobre el referido proyecto, pero al cierre de esta nota no había respuesta.
“La calle no es para nosotros”
En un sector del cantón La Labor, cientos de casas son construidas en serie, lo cual ya ha generado roces con pobladores de la zona al punto de que algunos lugareños fueron encarcelados por oponerse a la perforación de pozos de agua sin los respectivos permisos.
Vecinos de La Labor aseguran que la reconstrucción de la calle, con todo y sistema de alcantarillados, no es por ellos sino para favorecer la expansión de proyectos habitacionales.
“La calle no es para nosotros; la están reconstruyendo porque sabemos que aquí se vienen grandes proyectos de construcción de casas en estas tierras donde antes eran grandes cultivos de caña, de maíz y frijoles”, comentó un campesino.
Varios pobladores aseguran estar conscientes de que el gobierno no está arreglando la calle para favorecer a los habitantes nativos del lugar, sino para dar más plusvalía a las urbanizaciones.
“En este lugar nunca hemos tenido eso y mire todo lo que están construyendo”, comentó una mujer, en referencia a los pozos de captación de aguas residuales que está construyendo en medio de la calle en tramos intransitables.
Exigen construcción de puentes
Muchos vecinos de La Labor criticaron la forma en que se ha ejecutado la obra: a paso lento, poco personal y, específicamente, por haber destruido dos puentes en cuanto comenzaron a intervenir la calle.
Iban a botar el tercer puente que está en el tramo a reconstruir pero la población se opuso.
Los puentes fueron destruidos y hasta la fecha no han comenzado la construcción de los nuevos.
En uno hicieron un paso provisional que hace como un mes una fuerte correntada lo destruyó, según vecinos del lugar, debido a que colocaron tres tubos de unos 50 centímetros de diámetro que no fueron suficientes para dar paso a la gran correntada.
No hace mucho volvieron a construir uno que, supuestamente también es provisional, con tubos más grandes. La gente teme que lo dejen de manera permanente.
En otro no han hecho absolutamente nada, solo un paso provisional que pone en riesgo la vida de quienes transitan por el lugar debido a las correntadas.
De hecho, el pasado 2 de octubre ocurrió una tragedia que se cobró la vida de un lugareño que, de noche, quiso cruzar el paso en motocicleta pero fue arrastrado por una repentina correntada, aseguran pobladores del sector inmediato al centro escolar del cantón.
Los pobladores culpan a la DOM y a la empresa que ésta ha contratado. “Si no iban a construir de inmediato los puentes no los hubieran destruido. Tal vez Walter estuviera vivo”, comentó un vecino.
$8.3 MILLONES
es el costo de reconstrucción de 4.4 kilómetros de la calle principal de acceso al cantón Hacienda La Labor, Ahuachapán. El tiempo de ejecución de la obra era de 240 días. Según pobladores, comenzaron en febrero, por lo cual debieron haber terminado en septiembre.
Los habitantes de La Labor aseguran que los niños que asisten a la escuela, inmediata al puente donde el motociclista fue arrastrado, corren un gran riesgo porque aunque en el lugar no esté lloviendo, si ha llovido en la cordillera se generan correntadas repentinas que podrían ocasionar más tragedias.
Rutas alternas intransitables
El miércoles anterior, el malestar de los habitantes de La Labor había crecido debido a que la empresa constructora había prohibido tanto el paso peatonal como vehicular por la calle en reconstrucción.
Eso los obligaba a buscar caminos alternos. Uno de esos era por el sector conocido como Puertas Negras, donde la lluvia que cayó la noche del martes hizo intransitable esa angosta ruta.
Motociclistas y vehículos pequeños quedaron atascados debido al barro que se les pegaba en las llantas y guardafangos.
Dos jóvenes estudiantes se cayeron de su motocicleta, causándose lesiones leves. Otros tuvieron que empujar sus vehículos para sacarlos del fango. Lugareños comentaron que todos los accesos al cantón estaban en similares condiciones: intransitables. El martes anterior, un camión quedó atascado en un hoyo y el miércoles en la mañana ocurrió lo mismo con un autobús.
Según pobladores consultados, el ritmo que llevan en la construcción de los pozos de aguas servidas, el hecho de que aún no inicien la construcción de los dos puentes destruidos y el poco personal que se ve trabajando, les hace suponer que la afectación va para largo.
“Sinceramente no creo que lo terminen ni en un año. La DOM nos vino a fregar con esto. Botaron los puentes y destruyeron toda la calle. Todo lo quisieron hacer de una vez”, renegó un vecino.
El pasado 16 de marzo, el director de la DOM y el alcalde de Ahuachapán llegaron al cantón La Labor. Los pobladores aseguran que les llenó de esperanzas, sin embargo, más de siete meses después de aquella visita le reclaman que agilicen los trabajos que ya deberían estar concluidos, incluyendo los puentes con luces led que les prometieron.