Un banner en el que destacan las frases “No nos oponemos al progreso” y “No nos dejen sin un lugar donde vivir”, llama la atención de los conductores cuando se detienen en el semáforo situado entre el bulevar Constitución y la calle al Volcán.
La petición pública suma la frase “trabajamos toda una vida para pagar nuestros apartamentos, entendemos la necesidad”. Los afectados pretenden llamar la atención al ministerio de Obras Públicas, al ministerio de Vivienda y en general al Gobierno de El Salvador, pues gradualmente algunos de ellos, residentes entre el pasaje uno y dos del condominio Atlanta, situado detrás de la malla perimetral donde está el banner, han sido notificados de que se les ha hecho un valúo de sus apartamentos gradualmente desde finales de 2022 y sobre su no negociable desalojo por la ejecución del proyecto.
No es la primera vez que ellos salen a manifestarse, aunque el banner fue instalado a finales de enero de este año, anteriormente el comité de los vecinos que se verán afectados por el proyecto, llamado “Mejoramiento de la intersección en eje 63: bulevar Constitución y carretera SAL 37N” ejecutado a través de la empresa LEG S.A. de C.V., ha intentado reunirse con las autoridades del MOP sin éxito.
¿Quiénes habitan los condominios Atlanta?
Los condominios Atlanta están formados por más de 950 apartamentos, en los que habitan más de 4,000 personas según los integrantes de la actual directiva. La mayoría de residentes del lugar son personas de la tercera edad.
Roxana Cubías, la vocera del comité y de la directiva de los vecinos, declaró que en 2022 la empresa encargada del proyecto junto con trabajadores del MOP iniciaron las visitas casa por casa para anunciarles la construcción y que se encontraban verificando el terreno que tendría que modificar para la obra.
Cubías explica que los valúos empezaron a ser entregados casa por casa y que precisamente es por los valúos la inconformidad.
El MOP ha puesto precios de los inmuebles que van desde $10,000 hasta $30,000 dólares.
“Los habitantes no hemos sido notificados de la manera más acertada con una reunión general. Esta será una situación que nos afectará a todos y no solo a los que tendremos que desalojar”, dijo la vocera.
Quieren claridad
Es por ello que la directiva convocó a una reunión con todos los vecinos y se acordó entonces pedir al MOP que se les hablara del proyecto abiertamente, para lo cual recolectaron al mismo tiempo la firma de los asistentes. Los habitantes notificados que acudieron a la institución para expresar su desacuerdo con el precio de los valúos de sus viviendas no llegaron a ningún acuerdo con el MOP y dejaron la carta, pero hasta la fecha el ministerio no ha atendido su llamado.
“No nos oponemos al progreso, pero necesitamos que sean soluciones favorables para todos”, aclaró Cubías.
Los vecinos afirmaron que el valúo les parece injusto y que el precio ofrecido y hasta el momento no negociable no está acorde a los precios actuales de vivienda. “Pedimos que se nos dé la oportunidad de tener una vivienda digna y segura”, expresaron en la entrevista mientras respaldaban a su vocera en una de las áreas verdes del condominio.
Juramentación de directiva
Esta situación va de la mano con el problema de la legalidad de la directiva de vecinos del condominio, pues los actuales integrantes que la conforman no han sido juramentados por la alcaldía de Mejicanos, que ha pospuesto durante meses este procedimiento con distintas excusas según los habitantes.
Cubías comentó que la juramentación de la actual directiva es importante, pues sin la legalidad de los integrantes, el MOP les afirmó que no los tomará en cuenta para entablar un diálogo en los procesos de este proyecto.
Los habitantes advierten que de no tener respuesta del MOP podrían tomar acciones más drásticas, como el cierre del bulevar Constitución.
Además, hacen un llamado a los vecinos de los otros pasajes y de colonias aledañas a que se interesen en la situación, pues creen que también podrían ser afectados con situaciones como desabastecimiento de agua, contaminación de ruido, enfermedades respiratorias por el polvo, por mencionar algunos problemas.
José Luis Trejo, que tiene 9 años de alquilar una vivienda en una colonia aledaña a los condominios Atlanta, recalcó que el problema es cómo el MOP ejecuta el proyecto. “El silencio de las autoridades nos mantiene en incertidumbre, porque de lo poco que conocemos no sabemos más ”.
También, recalcó que su idea no es irse, pues sabe lo difícil que es encontrar una vivienda digna y segura. “Por el momento ni siquiera el dueño de la casa conoce bien la situación del proyecto”, agregó.
Leónidas Hernández, el ex trabajador del MOP que será desalojado por los trabajadores del MOP
Leónidas Hernández es un hombre de 68 años que recorrió uno de los condominios Atlanta para llevar al equipo de El Diario de Hoy hasta su apartamento para mostrarlo.
Alto, de cabellera blanca, de tez morena y con un leve cojeo, abre la puerta de su casa, el espacio es reducido y son notables las remodelaciones que hizo con el paso del tiempo, las cuales son adornadas con fotos de su familia conformada por seis hijos y su esposa.
De inmediato comentó que “la calle era tan mala aquí, hemos luchado mucho por lo que tenemos”. Don Leónidas es considerado de los habitantes fundadores de los condominios. Su llegada fue a finales de 1982, luego que fue damnificado del temporal que dejó deslaves en varias colonias de Mejicanos de la zona entre la colonia Montebello y San Ramón en septiembre del mismo año. Ya era padre de familia y tenía la urgencia de buscar un hogar nuevo para su familia.
“Fui beneficiado en esa época con este apartamento, aunque ni tanto; me tocó mendigar, rogar porque tenía a mis hijos pequeños a quienes resguardar”, recordó.
Desde entonces Hernández, quien ya era parte de la mano de obra del MOP, ha luchado por una vida digna para él, su familia y sus vecinos. “Fui parte de la primera directiva de los condominios en 1983”, recordó.
La primera lucha del ex trabajador del MOP fue por la instalación de los servicios básicos. “Nos cansamos, pagamos la conexión, luego íbamos a pedir que nos conectaran varias veces y los servicios nunca llegaban, hasta que casi que nos tomamos las oficinas de CAESS (Compañía de Alumbrado Eléctrico de San Salvador) nos hicieron caso. Estábamos cansados de pedir”, recordó.
Hernández vio con el paso de los años la primera ampliación del bulevar Constitución y la calle al Volcán, la cual afirmó que les benefició, pues poco a poco se fue convirtiendo en una zona céntrica donde tenían todo lo que podían necesitar, pero persistió el abandono por las autoridades municipales y de seguridad al condominio. “Siempre hemos hecho colectas para hacer las mejoras. La alcaldía lo que nos ha apoyado en alguna ocasión es con la mano de obra. Hemos carecido tantas cosas”, dijo.
Pese a esta situación el trabajador del MOP, que afirmó comenzó con palas y piochas a ganarse el sueldo hasta que la institución le otorgó un cargo administrativo, considera que el anunciado desalojo de los condominios le ha quitado el sueño. “Muchos somos de la tercera edad y ya no podemos trabajar como antes para poder comprar otra casa, quisiera que alguien se pusiera la mano en el corazón y nos ayudara”, afirmó.
Don Leónidas fue despedido del MOP cuando entró en vigencia el decreto de retiro voluntario, lo cual ha provocado la caída de la economía de su hogar y la imposibilidad de encontrar otra vivienda.
El Diario de Hoy realizó el pasado 20 de marzo una gestión de entrevista con el encargado de comunicaciones del MOP, Jorge Trillos, para conocer sobre el proyecto y las gestiones que se realizarán para reducir la afectación en las colonias y comunidades, pero hasta este momento no se ha obtenido una respuesta de la fecha para la entrevista.