Oso, un perro que en abril de 2015 atacó a pandilleros que pretendían lanzar una granada dentro del puesto policial de Santa María Ostuma, en La Paz, murió esta mañana informó la Policía Nacional Civil (PNC).
El perro acostumbraba a dormir en las afueras de la sede policial y era cuidado por los agentes.
Oso se puso en alerta cuando vio que los pandilleros a bordo de una motocicleta se detuvieron cerca de la puerta del puesto policial y se abalanzó sobre ellos, provocando que huyeran.
El ataque del canino a los delincuentes impidió que la granada alcanzara a los agentes, y a pesar de que el artefacto sí explotó, los policías resultaron ilesos y solo hubo daños materiales.
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La explosión dejó a Oso lesionado, perdió la audición desde entonces. Tras el hecho fue adoptado e incorporado a la Unidad Canina de la División Antinarcóticos de la PNC en donde fue cuidado.
"Oso falleció esta mañana, el agente canino fue un héroe y lo despedimos con un acto para recordar su gran servicio a nuestra institución y a los salvadoreños... Siempre te recordaremos, agente Oso", publicó la PNC en redes sociales.