Debido a que El Salvador no cuenta con una Ley de Identidad de Género, no se puede dar seguridad de que al buscar un cambio de nombre el resultado será positivo. Sin embargo, la Mesa Permanente por una Ley de Identidad de Género ha presentado hasta la fecha ocho demandas ante juzgados de familia.
Según información de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), de estos, dos han sido negadas, por lo que están en etapa de apelación, otros dos se encuentran en proceso y cuatro ya fueron aprobados.
Entre las personas que ya lograron la aprobación para el cambio de nombre están las activistas Bianka Rodríguez, Verónica López y Aldo Peña. Peña, quien el pasado 27 de julio obtuvo la sentencia favorable, contó a este medio la vulneración que sufrió en uno de los peritajes ordenados por la jueza. Para el activista, es necesario que todas las personas involucradas en este proceso estén sensibilizadas para que no sucedan estas revictimizaciones.
“Hay casos ganados, pero eso no significa que sea seguro por vía judicial. Cada juez tiene independencia judicial y esa independencia judicial le permite al juez elegir si cambia el nombre y el género o no lo cambia. Esto nos dice que la independencia judicial se maneja en cada uno de los juzgados diferente, por esto es necesario la ley”, explica Karla Guevara, directora del Colectivo Alejandría.
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Según esta activista, el contar con una Ley de Identidad de Género busca acabar con los procesos judiciales contenciosos para obtener un cambio de nombre. “Con una ley especial se habilitaría un proceso que establezca un camino seguro y accesible para todas las personas trans a la hora de aplicar al cambio de nombre”, agrega Guevara.
A pesar que las organizaciones por los derechos de personas LGBTIQ+ han trabajado en una propuesta desde hace 10 años, no ha habido voluntad política para conseguir la aprobación de dicha ley. En 2018, durante los últimos meses de la legislatura 2015-2018, diputadas recibieron la propuesta de ley de las organizaciones, sin embargo, durante toda la legislatura 2018-2021 no hubo siquiera discusión de la propuesta.
En mayo de 2021, las diputadas de la Comisión de la Mujer e Igualdad de Género mandaron al archivo la propuesta. Tres meses más tarde, las organizaciones llevaron una nueva propuesta, pero hasta la fecha no ha entrado a debate.
Tomando en cuenta este estancamiento, la organización Comcavis Trans El Salvador ha iniciado una convocatoria para dar asistencia a quienes quieran empezar ese proceso. Según la publicación, darán prioridad a hombres y mujeres trans en situación de riesgo, desplazamiento forzado y escasos recursos.