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Fundación brinda apoyo a sobrevivientes de derrames cerebrales

Un grupo de especialistas de diferentes disciplinas buscan dar atención a personas de escasos recursos. A través de la Fundación ACV , ofrecen atención psicológica, médica, rehabilitación y prevención, entre otros.

Por Xiomara Alfaro | Nov 09, 2024- 21:06

Foto EDH/ Menly Gonzalez

Alejandro Mundo es abogado de profesión, hace 15 años sufrió un Accidente Cerebro Vascular (ACV) del tallo cerebral que le provocó secuelas que, por mucho tiempo, lo incapacitaron para continuar con su vida cotidiana.

Esta condición no solo afectó su vida profesional sino también todo su entorno personal y familiar.

Relata que, a raíz del ACV ha tenido que aprender nuevamente a caminar, a hablar y poco a poco ha ido recuperando la visión y otras habilidades como la motricidad fina.

"En el caso mío me explicaban los médicos que, por la zona donde me dio (el ACV) tenía dos opciones: una que hubiera fallecido y la otra que hubiera quedado parapléjico", explica.

Desde el inicio del evento, sus tratamientos y consultas las llevó en el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), no obstante, recalca que tras un año de atención fue dado de alta, y es ahí donde empezó una nueva carrera contra el tiempo para evitar que los daños pronto fueran irreversibles.

"Pasé por diferentes etapas de terapias tanto en el Seguro Social como en Crio (Clínica de fisioterapia) y me di cuenta que ambas instituciones dan año de atención, y dan el año independientemente del estado en el que esté (el paciente) por la demanda que tienen", explica.

Es así como a través de un seguro médico disponible en su trabajo logró llegar a una clínica particular para dar seguimiento a sus terapias físicas y abordar su caso con apoyo psicológico.

Para Alejandro, haber pasado por un ACV no es una casualidad, al contrario, lo describe como "un propósito que está por concluirse".

Y es que a raíz de su experiencia, junto a un equipo multidisciplinario de especialistas, han creado la Fundación ACV. Uno de sus objetivos principales es ayudar a personas de escasos recursos, para que puedan continuar los tratamientos que les permitan una mejor calidad de vida después del ACV.

Clínica Mayo describe el Accidente Cerebro Vascular Isquémico como aquel que se produce cuando el suministro de sangre que va a partes del cerebro se obstruye o reduce. Esto evita que el tejido del cerebro reciba oxígeno y nutrientes, y las neuronas cerebrales comienzan a morir en minutos.

Otro tipo de accidente cerebrovascular es el hemorrágico, se produce cuando un vaso sanguíneo del cerebro tiene un derrame o se rompe y causa un sangrado. La sangre aumenta la presión en las neuronas cerebrales y las daña.

La Fundación ACV que se encuentra en fase de difusión de sus programas, recibió la personería jurídica en enero de este año. Asimismo ha iniciado con programas de promoción y recaudación de fondos a fin de ofrecer servicios de calidad a sus beneficiarios.

"La Fundación también es un centro de acogimiento para que la persona resuelva o solvente todas las dudas que en el hospital o en su establecimiento de salud no fueron aclaradas", expone Sandra Moreira, Psicóloga de la Fundación.

Sus representantes señalan que ya están en la capacidad para atender a las personas que lo necesiten con servicios psicológicos, médicos, rehabilitación, prevención, apoyo en autocuidado, terapias grupales, arteterapia, técnicas de relajación y asesoría jurídica, entre otros.

"Junto a profesionales de diferentes áreas hemos platicado sobre toda las vicisitudes que vive una persona sin recursos para pagar una terapia de $20, por ejemplo; por lo que decidimos poner cada uno nuestra especialidad al servicio de más personas, pero no solo abordar el tema de los cuidados y la rehabilitación, si no también desde un enfoque de prevención", explica Mundo.

La Fundación ACV, ubicada en la residencia Bella Santa Ana, en Santa Ana, atiende a pacientes con cita previa los días viernes y sábado. Su visión es ser una entidad comprometida con la rehabilitación de las personas sobrevivientes de ACV, y brindar atención integral mediante el acompañamiento en la inserción familiar y social.

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Fundacion ACV
Alejandro Mundo es abogado y fundador de la Fundación ACV. Foto EDH/ Menly Gonzalez

Arte terapia y relajación

En sus instalaciones un grupo de personas se reúnen los fines de semana para recibir clases de pintura. Estos son parte de los talleres que se desarrollan para obtener fondos en beneficio de la Fundación.

De manera artística cada participante, entre ellos Alejandro Mundo, elaboran paisajes, pinturas de animales u otros diseños abstractos en camisetas, cuadros, bolsos, botellas y otros.

"A través de la práctica de la pintura he logrado recuperar la motricidad fina porque al inicio cuando empecé a trabajar, tuve que empezar en silla de ruedas, luego con andadera y el uso de bastón, ahora todavía estamos trabajando un desequilibrio en la cadera", explica Mundo.

"La terapia ocupacional, en este caso la pintura, ayuda a mejorar la independencia en la realización de las actividades de la vida cotidiana", puntualiza Silvia de Rodríguez, maestra de pintura con experiencia en varias técnicas.

Hace algunos años, De Rodríguez sufrió un derrame facial y ha sido a través de su rol como docente (que la mantiene hablando constantemente) que ha logrado superar la parálisis en su rostro.

"Estos talleres también ayudan en el autoestima de la persona a través del trato, las conversaciones y la convivencia con los demás, así se va fortaleciendo la autonomía y desarrollando otros aspectos", resalta.

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Fundacion ACV
Las instalaciones cuentan con área médica y psicológica de terapia. Foto EDH/ Menly Gonzalez

Áreas adecuadas para la atención

Las instalaciones de la Fundación han sido adecuadas a las necesidades de los pacientes, cuenta con área de terapia física, masajes, área clínica, área de gimnasio y continúa con planes de expansión. En un futuro buscan poder dar cobertura en el área de San Salvador. Asimismo hacen el llamado a cooperantes y todo persona que quiera unirse a este grupo de profesionales a fin de brindar servicios integrales.

Parte de sus requerimientos son equipo e insumos para el área de rehabilitación física, terapia ocupacional, así como sillas de ruedas, un rotafolio, un oasis, entre otro mobiliario.

Si quiere comunicarse o recibir mayor información puede escribir al correo amundocruz@gmail.com o llamando a los teléfonos 6200-2992 y 7787-4569. También puede encontrarlos en redes sociales como FundaciónACV

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