El pasado 19 de octubre, la Presa El Chaparral, renombrada como 3 de febrero, fue inaugurada por el presidente Nayib Bukele, quien aseguró que el costo de la obra rondaba los 800 millones de dólares. Pero nada dijo de la deuda que tienen con las comunidades aledañas al proyecto.
La inauguración se realizó a pesar de que la Comisión Ejecutiva del Río Lempa (CEL) no le ha cumplido a los pobladores de varias comunidades aledañas al embalse, con la construcción de 19 obras sociales que serían construidas como compensación a los daños que las mismas sufrieron debido a la construcción de la represa y el embalse.
Las 19 obras que consistían en clínicas comunitarias, casas comunales, centros escolares, canchas de fútbol, paradas de buses y la adecuación de dos centros recreativos llevan 19 meses de retraso, a pesar de que la CEL está consciente de que con ello se mejoraría la calidad de vida de habitantes de cantones y caseríos de tres municipios ubicados en el “área de influencia directa” del proyecto.
“Dentro del Área de Influencia Directa que ocupará el embalse, se interrumpirá el paso entre áreas que tradicionalmente han estado comunicadas e infraestructura comunitaria, lo que generará cambios en las dinámicas cotidianas, comerciales y comunitarias. Estas obras van a contribuir de manera que estos cambios sean menos perceptibles, además de fortalecer la confianza de las comunidades con la Comisión”, indica un documento de la CEL.
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Las 19 obras en total, serían construidas en los municipios de San Luis de la Reina, Carolina y San Antonio, y tendrían un costo de 13 millones de dólares. Fueron adjudicados en la modalidad de contratación directa, es decir, sin pasar por un proceso de licitación pública, debido a la urgencia, según consta en documentos de la CEL a los cuales se ha tenido acceso.
Para el diseño y construcción de las 19 obras, la CEL contrató a la empresa mexicana Contratista General de América Latina, S.A. de C.V., sucursal El Salvador, (CGAL).
Lo hizo por recomendación de una empresa consultora que consideró que CGAL era la más indicada porque era una empresa ya instalada en el sitio, tenía experiencia en trabajos similares y estaba familiarizada con el Área de Influencia Directa, lo cual disminuía el riesgo de retraso de las obras.
El costo total de las 19 obras serían 13 millones de dólares, de los cuales CEL le adelantó casi la mitad. El tiempo de ejecución era de 210 días, es decir, siete meses. Así quedó establecido el 11 de marzo de 2022.
Pero de acuerdo con habitantes de las comunidades consultados, ninguna de las 19 obras ha sido construida.
El Diario de Hoy ha constatado que de algunas obras prometidas, la empresa CGAL tan solo hizo algunos hoyos para las fundaciones de las paredes, en otras solo colocó un rótulo en el que se anunciaba la obra a ser construida. Hasta ahí.
Puentes a lenta ejecución
La culminación de la presa hidroeléctrica requería la construcción de dos puentes y sus respectivas calles de acceso “necesaria para completar la construcción de las principales obras especializadas para lograr embalsar y para finalizar el proyecto declarado con categoría de URGENTE...”, indicó CEL en su sesión 3967 del 13 de octubre de 2021, en la cual se acordó la construcción de los dos puentes, uno en Carolina, y el otro en San Antonio.
La construcción de ambos puentes sobre el embalse tenía por “objetivo garantizar la conectividad vial eficiente y segura” de las comunidades.
Ambos puentes, en el contrato que CEL le dio a CGAL, costarían 24 millones de dólares. No terminó ninguno de los puentes. Tan solo fueron iniciados.
A finales de marzo de este año CGAL abandonó los trabajos en ambos puentes y de las 19 obras en las comunidades, debido a que CEL le pidió la terminación amigable de ambos contratos debido a los retrasos en la ejecución.
Pero CGAL no perdió. De acuerdo con la versión que la empresa le dio a la revista Voz Pública, publicada el 28 de abril de este año, como anticipo de la construcción de las 19 obras, CEL le dio 2.2 millones, y también le dio 12.7 millones en el mismo concepto, por el proyecto de construcción de los dos puentes.
CEL le entregó 14.9 millones de dólares por obras que la empresa mexicano, en algunos casos, ni comenzó.
En el caso de los dos puentes, CEL tuvo que contratar a otra empresa para que continuara ambas construcciones. De eso hace ya varios meses. Sin embargo, según imágenes publicadas por Voz Pública el pasado 18 de octubre, la construcción cuenta con poco avance. Las comunidades en la margen oriental del embalse tienen que usar lanchas para cruzarlo.
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De las 19 obras que serían construidas en las comunidades aledañas al embalse, no hay ningún avance y, según miembros de las directivas comunales, la CEL no les ha dicho si van a contratar a otras empresas para ejecutarlas.
Las comunidades se sienten defraudadas, pero aseguran que temen alzar su voz por miedo al régimen de excepción.