Aproximadamente a las 8:30 de la noche de ayer, una tragedia golpeó el caserío Las Cañas, en el cantón San Nicolás, del distrito de Apopa, San Salvador Oeste luego que una familia quedara soterrada tras la caída de un muro en su casa.
Según el padre de los dos niños fallecidos, el colapso inicial del muro de la casa fue seguido por un deslave que soterró a los menores de nueve y 12 años. Dos personas más, el abuelo y el tío de las víctimas, fueron trasladados hacia un hospital capitalino.
Los vecinos, quienes fueron los primeros en llegar al lugar del desastre, intentaron sin éxito rescatar a los niños atrapados entre los escombros.
VER: Recuperaron los cuerpos de dos niños soterrados tras colapsar muro en Apopa
La situación se volvió aún más complicada cuando, después, llegaron las autoridades de Protección Civil, la Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil (PNC).
Los residentes expresaron su frustración, alegando que se les impidió continuar con las labores de rescate y aseguraron que algunos de ellos estaban tomando fotos en lugar de ayudar. "Nos apartaron y no nos dejaron ayudar", comentaron los vecinos.
Desde las 5 de la mañana de este sábado, vecinos y familiares han estado trabajando arduamente para retirar los escombros. Hace poco, un equipo de trabajadores de la alcaldía y Protección Civil se unió a las labores de remoción.
Se espera que la funeraria traiga los cuerpos de los menores al mediodía del sábado, y se ha previsto que serán velados en una casa contigua ya que no tienen otro lugar donde realizar la velación.
Todas sus cosas quedaron inservibles por el lodo que entró en toda la vivienda. En la mañana sacaban los escombros y limpiaban la habitación.
Los familiares, quienes están enfrentando una difícil situación, informan que no cuentan con otro lugar donde ir, ni con ropa o víveres. La comunidad sigue en duelo y esperando apoyo en medio de esta tragedia.
"Teníamos 14 años de vivir aquí"
De acuerdo con el testimonio de la familia, ellos llevaban 14 años viviendo en el sector sin que nada pasara hasta la noche del viernes luego de una torrencial lluvia.
Aseguran que antes vivían en otra zona cercana a un río y que durante el invierno el caudal incrementaba e inundaba su vivienda y por ello se mudaron a donde viven actualmente.