El principal sospechoso de haber asesinado a la agente policial Carla Ayala en diciembre de 2017, a la salida de un festejo navideño en la base del extinto Grupo de Reacción Policial (GRP), fue sentenciado a 50 años de cárcel, la pena máxima por feminicidio agravado.
Juan Josué Castillo Arévalo, indicativo ‘Samurai’, y prófugo desde el día del crimen, fue sentenciado por el Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación contra las Mujeres de Santa Ana y mediante las reformas al Código Procesal Penal, aprobadas por la Asamblea Legislativa en septiembre de 2022, que permiten procesar y condenar a acusados sin estar aún bajo detención.
La pena contra ‘Samurai’ se suma a la que recibió el pasado 2 de marzo, cuando el Juzgado de Sentencia de San Miguel lo condenó a 60 años de cárcel por el homicidio de dos hombres en los departamentos de Usulután y San Miguel, entre los años 2016 y 2017, cuando formaba parte de una estructura dedicada al sicariato (asesinato por encargo).
Junto con Castillo Arévalo, esta tarde han sido condenados los expolicías Wilfredo Deras Hernández, Ovidio Antonio Pacheco Morales, Pablo Antonio Estrada Villalobos y Alex Obdulio López Martínez, todos por el delito de incumplimiento de deberes. Los tres primeros recibieron penas de ocho años de prisión y el último a siete.
La jueza ha desestimado la acusación de comisión por omisión en el delito de feminicidio en contra de Deras Hernández y Pacheco Morales. Asimismo, absolvió de todo cargo a Julio César Flores Castro quien al momento del asesinato era jefe del GRP.
La Policía Nacional Civil decidió disolver el GRP menos de dos meses después del asesinato y desaparición de Carla Ayala y sustituido por otro cuerpo élite policial denominado “Jaguares”.
La corporación policial fue condenada, además, a resarcir a la familia de Carla Ayala con $50,000 y le ha ordenado extender una disculpa pública.
El Crimen
Carla Ayala fue herida de bala por Castillo Arévalo, entre la noche del 28 y madrugada del 29 de diciembre de 2017. Durante meses su paradero se mantuvo desconocido y no fue hasta el 7 de septiembre de 2018, que hallaron sus restos en un terreno rústico del cantón Los Hornos, distrito de San Francisco Javier, actual Usulután Oeste.
En las primeras semanas tras el hecho, hubo señalamientos sobre cómo ‘Samurai’ logró escapar a bordo de un vehículo policial junto con Ayala, herida de gravedad.
En octubre de 2020, a casi tres años del asesinato, seis policías y tres civiles recibieron condenas de entre seis y ocho años de prisión por facilitar la huida de ‘Samurai’ y encubrir el crimen, ellos fueron:
Sin embargo, en julio de 2021, La Cámara Especializada para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las Mujeres ordenó repetir el juicio contra cuatro imputados (Estrada Villalobos, Pacheco Morales, Deras Hernández y López Martínez), así como para el jefe Julio César Flores Castro, quien también fue absuelto en esa ocasión.
La razón, aparentemente, la jueza en aquel momento no sustentó las razones por las cuáles estos imputados no fueron procesados por la participación indirecta en el feminicidio de la agente sino solo por incumplimiento de deberes. Ahora, han vuelto a ser condenados por incumplimiento de deberes.