Dos agentes policiales fueron arrestados tras ser denunciados que, estando de servicio, completamente uniformados, se habían emborrachado y estaban realizando disparos de arma de fuego con las pistolas asignadas como equipo.
De acuerdo con reportes policiales a los que El Diario de Hoy tuvo acceso, el primero de los policías fue capturado a las 10:30 p.m. del sábado, y fue identificado como Josué Daniel E. O., de 41 años. El segundo policía, identificado como Juan Manuel M.A., de 47 años, fue arrestado a la 1:45 a.m. de este domingo.
El reporte policial indica que personas residentes en el cantón San Jerónimo, distrito de Metapán, departamento de Santa Ana, llamaron a la Unidad de Emergencias 911 para informar que dos agentes policiales, destacados en el puesto policial ubicado en el mismo cantón, se encontraban ebrios y realizando disparos de arma de fuego en el caserío El Puntito.
Cuando un equipo policial llegó al puesto policial del cantón San Jerónimo, a verificar la información aportada por la ciudadanía, solo encontraron al agente Josué Daniel, en estado de ebriedad, completamente uniformado porque estaba de servicio,
Al proceder a detenerlo también le decomisaron su arma de equipo, una pistola Smith & Wesson, calibre 9 mm, serie PNC 2698, y “un cargador sin ningún cartucho”, es decir, que posiblemente los había disparado todos.
Luego de capturar al primer agente, los policías procedieron a buscar el lugar donde habían hecho los disparos y también a buscar al otro agente policial, quien se había llevado su arma de equipo asignada.
A las 12:00 de la medianoche, es decir, 90 minutos después de capturar al primer agente, el segundo policía no había sido encontrado, por lo que reportaron el incidente como abandono de servicio.
Mientras tanto, el primer policía capturado se negó a que le practicasen la prueba de alcohol en sangre, por lo cual, los captores se limitaron a elaborar un acta para dejar constancia de su negativa.
A primera hora de este 20 de abril, mientras realizaban la búsqueda del agente Juan Manuel, un sargento policial les informó que éste había regresado al puesto policial y que aparentemente estaba bajo los efectos del alcohol, según indica el reporte policial.
10 A 15 AÑOS
El delito de tenencia, portación o conducción ilegal o irresponsable de arma de fuego es penado con entre 10 a 15 años de prisión, según el Decreto Legislativo 212, de noviembre de 2021
A pesar de que los agentes fueron denunciados por realizar disparos de arma de fuego y que el cargador de la pistola decomisada a Josué Daniel E. O. no tenía ningún cartucho en el cargador, los reportes policiales indican que ambos fueron capturados por el delito de tenencia, portación o conducción ilegal o irresponsable de arma de fuego, castigado con una pena de entre 10 a 15 años de prisión, según la última reforma penal hecha en noviembre del 2021, según el Decreto Legislativo 212.
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Policía con problemas de alcoholismo
De acuerdo con fuentes policiales, no es la primera vez que el policía Josué Daniel E.O. enfrenta problemas por su estado de ebriedad.
Las fuentes recordaron que en 2024, este mismo policía protagonizó un incidente en Metapán, con elementos del Cuerpo de Agentes Metropolitanos (CAM) de dicha alcaldía, a quienes luego acusó, haciéndose la víctima, tras lo cual fueron capturados cuatro miembros del CAM por el delito de lesiones.
Registros periodísticos indican que el 1 de enero de 2024, el mencionado policía protagonizó un incidente con un agente del CAM de Metapán a quien, supuestamente en estado de ebriedad llegó a buscarlo para discutir acaloradamente, lo cual derivó en agresiones físicas.
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Otros tres empleados municipales intervinieron para separarlos, lo esposaron y entregaron a otros agentes policiales; sin embargo, un hermano del agente policial, puso la denuncia en contra de los empleados municipales por el delito de lesiones.
Los empleados municipales fueron capturados a finales de febrero de 2024 y en un proceso abreviado, fueron condenados a una pena mínima de prisión que le fue reemplazada por reglas de conducta; también fueron condenados a tuvieron que pagarle, cada uno de los empleados municipales, la suma de 300 dólares.
El Diario de Hoy entrevistó a uno de los agentes municipales, que pidió no ser identificado, y éste aseguró que tuvieron que aceptar el delito para no continuar detenidos, y tuvieron que aceptar también el pago por daños aunque los golpes se los había ocasionado el agente policial al caerse de su propia motocicleta, la cual conducía en estado de ebriedad.
“Lo dejamos todo en las manos de Dios. Nosotros hemos quedado firmando por dos años y tuvimos que pagarle 300 dólares cada uno para quedar libres”, afirmó la fuente.
De momento, la Policía Nacional Civil (PNC) no ha presentado a ninguno de los dos agentes capturados.
