Cáritas El Salvador, a través del proyecto Alcance, trabaja en la construcción de obras de mitigación en ocho comunidades ubicadas en los alrededores de la laguna Olomega, en las jurisdicciones de San Miguel y municipio El Carmen, en el departamento de La Unión.
Alcance es un proyecto que vienen desarrollando desde el 2021, enfocado a la gestión de riesgos y fortalecer las capacidades de respuesta en las mismas poblaciones beneficiadas.
Las zonas favorecidas son consideradas como vulnerables por las inundaciones debido a las fuertes lluvias y el desbordamiento de la laguna. En El Carmen, las comunidades incluidas en el proyecto son Olomega, Punta de Navarro, El Zapotal y El Espino. En San Miguel están Las Tablas, El Espino, La Pelota y Los Ranchos.
Las obras consisten en construcción y rehabilitación de pasarelas como rutas de evacuación para las poblaciones del lugar, para facilitar las atenciones en emergencias y la casa comunal en Punta de Navarro.
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Marvin Rivera Gómez, técnico de proyecto Alcance, de la Diócesis de San Miguel, detalló que en las obras grises Cáritas aporta todos los materiales y los habitantes la mano de obra.
Según Gómez Rivera, el caserío Punta de Navarro es un sitio vulnerable a las inundaciones y deslizamiento que durante las emergencias queda aislado y no contaban con un local para albergue.
“Priorizaron que necesitaban construir una casa comunal, aunque ellos habían avanzado con la construcción de un muro de protección; la mayor inversión y esfuerzo es de la comunidad”, añadió.
“Hay un convenio o carta de entendimiento donde la alcaldía de la jurisdicción se comprometió como contrapartida a la construcción del techo de la casa comunal”, agregó Gómez Rivera.
En el caserío Punta de Navarro, del cantón El Zapotal, hace dos meses que la comunidad terminó de construir las paredes de la casa comunal; aseguran que están esperando que la alcaldía cumpla con la construcción del techo.
Juan Santos Castro, coordinador de Protección Civil Comunal, señaló que la prioridad para ellos es contar con unas instalaciones para albergar a los afectados durante las emergencias y desarrollar algunas actividades comunitarias.
Anteriormente, tenían una pequeña champa de malla y láminas, que usaban como albergue.
“En caso que la alcaldía no cumpla, nos tocará hacer algunos eventos para recaudar dinero y hacer la parte que a ellos les corresponde; aun nos falta trabajar en la construcción del piso, el sistema eléctrico, las ventanas y puertas”, agregó Castro.
Melva Luna, integrante de la comisión comunal, detalló que cada vez que tienen emergencias han usado la champa que improvisaban como albergue, que era de lámina, malla y la cubrían con plástico para proteger a los niños durante las inundaciones.
“Como el espacio era reducido solo albergábamos a los niños, aunque no eran las condiciones adecuadas; por esa misma situación es que priorizamos que necesitamos contar con una casa comunal y hemos encontrado el apoyo de Cáritas, es un esfuerzo donde los habitantes hemos colaborado con trabajo”, agregó Luna.
Se buscó la versión vía teléfono de la alcaldesa Verónica Guevara; la llamada fue atendida por Manuel Díaz, asistente del despacho de la alcaldesa, quien explicó que no tenía esos datos, que para el próximo jueves 30 de noviembre hay reunión de concejo, “donde creo que tiene que ir por aprobación para poder sacar los fondos para construir ese techo, el convenio ahí está, pero sabe que todo tiene que salir de acá de la alcaldía con una aprobación mayoritaria de votación”.
El acuerdo para el convenio se aprobó hace varios meses, pero para sacar el fondo para construir el techo tiene que irse nuevamente a votación, explicó Díaz.