El cáncer de mama es una preocupación de salud pública en todo el mundo, y El Salvador no es la excepción. A medida que las tasas de diagnóstico continúan en aumento, es fundamental comprender la situación actual en el país y cómo podemos tomar medidas para proteger nuestra salud y la de nuestros seres queridos.
El doctor Finlander Rosales, miembro de la Asociación Salvadoreña de Oncología (ASONCO), expone sobre la prevalencia del cáncer de mama en El Salvador, los factores de riesgo asociados y la importancia de la detección temprana en la lucha contra esta enfermedad.
Según cifras del Global Cancer Observatory, en El Salvador, para el año 2018, el cáncer de mama representó el 14,4 % del total de cánceres, con una tasa de incidencia de cáncer de mama en mujeres que fue de 39,9 casos por 100,000 habitantes, en comparación con el año 2020, hubo un aumento de los casos diagnosticados de cáncer de mama, por lo que pasó a representar el 16,4% del total de cánceres, colocándose el cáncer en el número uno en el país. En ese año, la tasa de incidencia de cáncer de mama en mujeres fue de 40,5 casos por 100.000 habitantes.
El doctor Rosales es un reconocido experto en el campo de la oncología en El Salvador y ha dedicado su vida profesional a la lucha contra el cáncer. En esta entrevista, exploramos el panorama actual de los casos de cáncer de mama en El Salvador y la importancia de la detección temprana para prevenir esta enfermedad devastadora.
¿Cuál es la importancia de la concientización sobre el cáncer de mama en El Salvador?
La Organización Mundial de la Salud definió octubre como el mes para poder concientizar a la población femenina sobre la importancia de detectar temprano esta enfermedad. Es triste ver pacientes que llegan con un estado exageradamente voluminoso en sus pechos, cuando tenemos métodos de diagnósticos que pueden hacer prematuramente la detección de este tipo de cáncer. Ahí radica la importancia, hacer conciencia en la sociedad en general.
¿Usted conoce los datos y estadísticas más recientes sobre la incidencia de cáncer de mama en El Salvador?
Las estadísticas de Globocan* y los registros de cada centro que maneja cáncer en el país son bastante heterogéneas, algunas veces ambiguas. No tenemos un registro nacional de cáncer aún, aunque creo que el Ministerio de Salud está trabajando en eso. Pero, por ejemplo, el Instituto Nacional del Cáncer, en un estudio que publicaron en el 2017, referían que ellos ven entre 400 a 420 casos de cáncer de mama nuevos. El Hospital de Oncología del Seguro Social refiere que cada año andan entre 550 a 600 casos nuevos de cáncer de mama. A nivel de Ministerio de Salud, que reúne al Hospital Nacional de Maternidad y el Hospital Nacional Rosales que manejan cáncer, andarán entre los 500, 600 casos nuevos de cáncer.
En el sistema de salud privado tenemos la obligación de reportar los casos nuevos de cáncer, que serán como unos 80 o 70 casos de cáncer de mama. Cuando tú haces la sumatoria, podemos decir que el cáncer de mama en el país andará ahí por unos 1800 a 1900 casos nuevos. Pero vuelvo a repetir, este dato no es homogéneo, sino que es un dato que tiende a dar muchos falsos positivos. Pero ya con mis 25 años de experiencia te puedo decir que más o menos ese es el estimado de incidencia de cáncer de mama en el país cada año.
¿Cuáles son los factores de riesgo más comunes asociados con el cáncer de mama en la población salvadoreña?
Los factores de riesgo de cáncer de mama en las mujeres están asociados a cinco elementos. El primero es genético. Si una mujer sabe que en su familia han existido casos de cáncer de mama, esa mujer debe preocuparse porque probablemente tiene la carga genética y en cualquier etapa de su vida, va a despertar ese gen y el cáncer comenzará a mutar.
La mujer con esta carga genética tiene que poner más enfoque en asistir con su médico y en examinarse para poder hacer el diagnóstico temprano. Hay países, incluido nuestro país, que cuando una mujer se da cuenta de que su madre sufrió cáncer de mama, es posible retirar los senos para evitar la posibilidad de que pueda desarrollarse la enfermedad, pero esto se hace con estudios clínicos.
El segundo factor de riesgo es el estilo de vida. Hay estilos de vida que predisponen a la mujer a que adolezca cáncer de mama más frecuentemente, como el alcoholismo; tabaquismo; sedentarismo; obesidad y exceso de alimentos ricos en estrógenos. El historial obstétrico de la mujer es el tercer factor de riesgo. Una mujer que nunca ha tenido hijos tiene alta probabilidad de cáncer de mama.
Cuarto factor, es la ingesta de suplementos estrogénicos o suplementos esteroidales frecuentemente. Aunque hoy cada vez es menos, pero antes el médico cuando venía una paciente en su periodo de menopausia le comenzaba a dar cantidad de suplementos estrogénicos y de repente miraban que esa mujer comenzaba a desarrollar cáncer. El obstetra, el ginecólogo, el internista, o el médico que quiere darle un suplemento estrogénico a esta mujer en esa etapa de su vida, debe examinar bien el caso para ver si no va a cometer un error y le va a predisponer a que el cáncer salga a la luz.
Y el quinto factor de riesgo es la negligencia de la paciente. Ella se ve, se toca, se siente, ve el nódulo, ve que va creciendo su mama, se va poniendo roja y a pesar de todo esto no consulta.
¿Cómo ha evolucionado el tratamiento y la detección temprana del cáncer de mama en los últimos años?
Ahora los niveles de detección temprana son altos, gracias a que tenemos mejores métodos de diagnóstico: mamografías, imágenes 3D, ultrasonografías más acuciosas, resonancias magnéticas de la mama. Todas nos ayudan a poder diferenciar entre lo que ve el ultrasonografista y lo que ve el mamógrafo. Este conjunto de imágenes nos hace detectar muy tempranamente el caso. Además de la conciencia que tiene hoy la mujer de estarse examinando sus senos.
Hoy en día tenemos modalidades de tratamiento para el cáncer de mama que hace una década no teníamos. Hoy tenemos la inmunoterapia; la terapia dirigida; además de la radioterapia, la quimioterapia, la cirugía, que también han ido mejorando sus técnicas y ha habido nuevos medicamentos.
Yo diría que el mayor avance está en la inmunoterapia y la terapia dirigida contra biomarcadores que sobre expresa el cáncer de mama de cada una de las pacientes.
¿Cuáles son los desafíos que enfrentan las pacientes con cáncer de mama en El Salvador en términos de acceso a la atención médica y apoyo emocional?
A pesar de que tú escuchas que ya está el Hospital de Oncología, el Hospital del Cáncer, el Hospital Nacional Rosales, el Hospital de Maternidad. Hace dos quinquenios, el gobierno instaló mamógrafos en varias clínicas en cada departamento del país, pero a pesar de todo eso, siempre la paciente enfrenta muchos desafíos y mitos en nuestras sociedades.
Si hay mayor soporte, indiscutiblemente, por ejemplo, la Asociación Salvadoreña de Pacientes Oncológicos ayuda a llevar de la mano a los pacientes en cada etapa de su tratamiento para que puedan superarlo fácilmente. Hay muchas fundaciones que también colaboran en esto. En los hospitales donde se trata cáncer existe un mayor acompañamiento psicológico. Hay más herramientas para ayudar a enfrentar todos los temores que surgen cuando uno da este diagnóstico.
Entonces yo creo que hemos mejorado en cuanto a esos desafíos en ayudar a los pacientes a poder superar y sobrellevar mejor el tratamiento, que es largo, y aceptar muchas situaciones de los tratamientos como la mutilación del cuerpo, los cambios que dan las quimioterapias, ayudarles que sean fácilmente llevable.
¿Cuáles son las recomendaciones claves para la detección temprana del cáncer de mama que debe conocer la población?
Número uno, que la mujer tenga conciencia de que el cáncer de mama está ahí a la vuelta de la esquina. Una de cada 10 mujeres va a adolecer del cáncer de mama en cualquier etapa de su vida. Entonces, saber que el cáncer en cualquier momento puede aparecer, especialmente si se tienen factores de riesgo. Si nunca tuvo hijos, si es obesa, si ingiere cantidad de estrógenos, de esteroides, tiene que estar atenta.
Dos es que el diagnóstico de cáncer de mama la mujer puede tenerlo, literalmente, en sus manos, pues cada vez que se ducha puede examinar sus senos, puede sentir cambios morfológicos en ellos y eso nos ayuda a tener un mejor diagnóstico de esta enfermedad.
¿Cómo pueden las personas apoyar la causa de la lucha contra el cáncer de mama en El Salvador?
Empezando con la familia, por ejemplo, invitar a las mujeres de nuestra familia a que examinen sus senos. El apoyo de la sociedad también es importante, hace diez años la sociedad no tenía el nivel de conciencia que existe hoy respecto al tema. Hoy se involucran diversas entidades del gobierno, entidades privadas.
La sociedad ya se involucra, hay caravanas, hay maratones y otros eventos. Todo eso ayuda a que la mujer tome un mayor grado de conciencia. La educación de la pareja es igual de importante, he atendido muchos casos en los que la pareja es la que ha detectado algo anormal y comienza ahí el proceso para un diagnóstico temprano.
Entonces la familia, la sociedad, las entidades de salud y las entidades de soporte de cáncer como son la Asociación de Pacientes Oncológicos, la Fundación Edificando Vida y muchas otras que hoy ayudan a que las mujeres tomen más conciencia para poder hacer el diagnóstico oportuno.
¿Qué mensaje le gustaría transmitir a las mujeres y a sus familias en el mes de la concientización sobre el cáncer de mama?
El cáncer de mama es una enfermedad curable, que, aunque esté en etapas avanzadas fácilmente, uno puede ofrecer a la paciente mucha calidad y cantidad de vida. Pero es necesario que las mujeres se acerquen a las unidades de atención de salud, a los médicos, para examinar sus senos.
Cuando vean que un centro de imágenes está promocionando mamografías, entren y háganse una mamografía. Un momentito de dolor puede hacer que te cambien la vida para siempre. Esta enfermedad puede aparecer en cualquier etapa de la vida y que sepan que hay tratamientos nuevos, muy novedosos.
Cada vez estamos logrando poder distinguir con mayor facilidad las poblaciones de cáncer de mama a las que podemos dar cierta terapia, otras terapias a otras, y no atacar la enfermedad de forma global, a todas las mujeres con el mismo tratamiento. Hoy existe la terapia personalizada, la terapia dirigida. Cada médico y oncólogo que tiene una paciente con cáncer se encarga de revisar varios marcadores para ver qué tipo de terapia se va a proporcionar a la paciente y personalizar su tratamiento para poder ayudarle a superar la enfermedad.
Números de contacto del Dr. Finlander Rosales: 2226-6015 y 2263-219.
El proyecto Globocan es una iniciativa de la International Agency for Research on Cancer IARC y tiene como objetivo proporcionar las estimaciones actuales de incidencia y mortalidad de los principales tipos de cáncer, a nivel nacional y para todos los países del mundo.