El diagnóstico positivo a cáncer de mama se ha vuelto cada vez más frecuente en el territorio salvadoreño, según la Asociación Salvadoreña para la Prevención del Cáncer (ASAPRECAN), una situación que no está relacionada solo con la educación y concientización sobre el tema.
La doctora Lisseth Ruiz de Campos, presidenta de la asociación, detalló que lo más preocupante es que en los últimos años al momento del diagnóstico un 60% de las pacientes ya se encuentran en fases avanzadas de la enfermedad.
A través del programa Promesa para Ganarle al Cáncer de Mama implementado por la empresa AVON, en coordinación con ASAPRECAN, se hizo entrega de kit con una prótesis solidaria y un sostén especial a 60 mujeres sobrevivientes de cáncer, en lo que va del año se han realizado dos eventos similares logrado beneficiar a más de 100 mujeres.
Dicha alianza inició en 2018 brindando a las mujeres un soporte emocional a través de una red de apoyo, facilitando el acceso a especialistas, estudios médicos y su acompañamiento durante el proceso de recuperación.
“El cáncer de mama es el más frecuente en las mujeres en todo el mundo, la Organización Mundial de la Salud reporta para el año 2020 más de 2 millones y medio de casos nuevos en todo el mundo, El Salvador no es la excepción la misma Organización Mundial de la Salud da una incidencia de 1,563 casos nuevos cada año es decir que para el 2020 esa era el número reportado”, señaló la dra., Ruiz, sin embargo recalcó que las estadísticas se descoordinación durante pandemia.
Para la especialista recalcó la importancia que tiene la educación en el proceso de detección temprana y con combate de la enfermedad, “el principal factor de riesgo para adolecer cáncer de mama es ser mujer entonces por el hecho de ser mujer todas somos vulnerables”, argumentando que al realizar sondeos en las comunidades nadie lo reconoce como un factor detonante de la enfermedad.
Constantemente la fundación realiza llamados a la población femenina para realizarse exámenes preventivos debido a que en los últimos años se ha demostrado que la edad en la que está enfermedad aparece cada vez es más temprana, afectando incluso a mujeres menores de 25 años.
“Todas las mujeres que están aquí son mujeres que han enfrentado un diagnóstico de cáncer de mama. Además de eso como parte del tratamiento para el cáncer de mama, les han extirpado una glándula mamaria, este procedimiento se llama mastectomía y en tres de ellas ha sido bilateral, después la mujer entra en ese proceso de recuperación también necesita apoyo en cada una no solo de su familia de la sociedad del sistema de salud”, agregó la presidenta de ASAPRECAN.
Mirna Estrada, una de las participantes y sobrevivientes de la enfermedad relató cómo había descubierto que su cuerpo estaba siendo afectado por el cáncer cuando se encontraba en “la mejor etapa de la vida”, debido a su posición en el trabajo, actividad física constante e incluso una mejor alimentación debido a que el proceso pandemia le permitía dedicarse más tiempo.
“Estaba en el mejor momento de mi vida, estaba super sana y de haciendo las cosas más ordenadas, la verdad, para mí fue realmente abrumador en ese momento porque no me imaginé sin tener antecedentes de nada, ni enfermedades, que iba pasar esta etapa, pero sinceramente le pedí a Dios que me tomara de sus manos”, señaló Estrada.
“Y aquí estamos yo no quisiera hablarles de lo negativo que pasamos, porque yo sé que todas sabemos lo duro que es lo duro que es esta enfermedad el proceso, pero nunca estamos solas aferrémonos siempre a la mano de Dios aferrémonos. Bendito Dios como cada uno de ustedes, el que ha salido adelante es nada más transmitirles el positivismo y esa fuerza esa resiliencia para manejar todo lo que venga”, agregó Estrada.