Unos 15 días antes de ser asesinada Carlota salió de paseo a visitar a unos familiares donde se le vio muy feliz, pero tenía una preocupación, regresar a casa temprano para darle comida a Ana Gloria, una señora a la que le había brindado un lugar para vivir en su casa, después que la encontró desorientada en las calles de Zacatecoluca.
Vecinos ya habían advertido a los familiares de Carlota Rosales, de 84 años, que Ana Gloria le gritaba y amenazaba a la anciana y consideraban que era un peligro.
Ante esas alertas, un nieto y una hija habían intentado llevarse a la anciana, pero ella había desistido en una actitud de buena samaritana diciendo que Ana Gloria no tenía quien le ayude.
El temor de vecinos y familiares se concretó el 4 de julio, cuando Ana Gloria Urquilla, de 57 años, vapuleó a la anciana hasta dejarla moribunda con múltiples lesiones causadas con un palo, dentro de su vivienda localizada en el cantón El Espino Abajo, municipio de Zacatecoluca, departamento de La Paz.
Al escuchar el altercado los vecinos ingresaron a la casa, donde encontraron a Carlota herida y moribunda, la auxiliaron y la trasladaron al hospital Santa Teresa de Zacatecoluca, pero horas más tarde la señora murió debido a las múltiples lesiones de gravedad en diferentes partes del cuerpo.
Luis Quintanilla, nieto de Carlota, describió a su abuela como una buena samaritana que no dudaba en ayudar a otros y esa no era la primera vez que brindaba techo a una persona desamparada. En 2017, la anciana ayudó a Lilian, otra señora que de igual manera no tenía casa. Lilian vivió en esa casa durante dos años hasta que murió de forma natural.
“Lo que le pasó a mi abuela no es fácil porque ella le daba comida a esta señora, pero nunca imaginé que la iba a asesinar” expresó el nieto.
Antes de ingresar la audiencia inicial contra la acusada del asesinato de su abuela, Luis expresó que su único deseo era que las autoridades tomaran carta en el asunto y de esa forma evitar otra tragedia.
Un álbum de fotos de su abuela en el cecular y Capullo, la mascota de su abuela, es lo que conserva el nieto para mantener la memoria de Carlota.
“A ella no le gustaba vivir con otros familiares porque le gustaba sentirse libre para poder ayudar a otros” dijo con resignación Luis.
En la audiencia inicial el Juzgado Primero de Paz de Zacatecoluca ordenó que Ana Gloria Urquilla, acusada del asesinato de una anciana, continúe en prisión, mientras sigue el proceso judicial en su contra por el delito de homicidio agravado.