Este 3 de mayo, Día de la Libertad de Prensa, la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) reportó la situación del periodismo en el país.
El reporte concluye que “en los últimos años, existe una sistemática persecución a medios independientes o con contenidos narrativos distintos a los oficiales”.
APES da cuenta de que ningún gobierno en la historia reciente de El Salvador ha sido amigable a la prensa. Sin embargo, sostiene que en el gobierno actual “se observa que existe un incremento elevado en los niveles de intolerancia e irrespeto a la prensa en El Salvador”.
#EnVivo | En el marco del Día Mundial de la Libertad de Prensa, la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) presenta informe sobre la situación de prensa en el primer cuatrimestre del año 2022.
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Posted by elsalvador.com on Tuesday, May 3, 2022
Solo en 2019, la asociación registró 77 casos de agresiones a periodistas. En 2020, 125 vulneraciones. Y en 2021, dan cuenta de 219 episodios de afrenta al ejercicio periodístico. Es decir, no solo es más peligroso ejercer el periodismo bajo la presidencia de Nayib Bukele, pero cada año es más intolerante la gestión hacia quienes informan apartados de la línea oficial.
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Diversos tipos de agresiones
En su informe final de vulneraciones a la libertad de prensa, la Asociación de Periodistas de El Salvador reporta diversos tipos de agresiones a los periodistas. Entre ellas, resaltan “agresiones físicas, amenazas, intimidaciones y restricciones al ejercicio del periodismo”.
Además señalan el uso de las instituciones del Estado para “perseguir a quienes disienten de su narrativa”.
Asimismo, registran que desde el inicio del gobierno actual, “existe mayor información de carácter público reservada”. Esto se agrava con la captura del Instituto de Acceso a la Información Pública, el cual APES califica de estar “totalmente alejado de su mandato legal como ente garante”.
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Los comisionados de esta entidad, que nació para garantizar la transparencia en el país, deben ser independientes de cualquier influencia política, a fin de evitar conflictos de interés en casos que atañen al bando de su preferencia. Desde que llegó al poder, Nayib Bukele ha nombrado ahí a al menos tres comisionados afines a su proyecto. Una de ellas incluso fue precandidata a diputada por el partido Nuevas Ideas.
Esto ha derivado en más ocultamiento de información. Entre esta, hay datos sobre “contrataciones, centros de cuarentena, compras públicas de emergencia, testeos para detectar el avance del covid-19, solicitudes de refugio o compensaciones económicas, personas detenidas por circular en la vía pública, entre otros temas”, ilustra APES.
Finalmente, la institución da cuenta de agresiones al ejercicio de la profesión, las cuales son particularmente graves para las mujeres, que se enfrentan a “carga de misoginia en las redes sociales, ámbito laboral y privado”.