El monto del presupuesto de la Asamblea Legislativa para funcionamiento de 2023 es de $57.6 millones. Si bien no ha sufrido ningún incremento en relación con el aprobado este año, la Junta Directiva del Congreso sigue ocultando hacia dónde van los gastos con fondos públicos.
En apenas 4 páginas que contiene el dictamen aprobado este 22 de diciembre en el pleno, se establece que la Junta Directiva mediante el Comité de Formulación del Presupuesto Institucional para 2023, realizó el estudio y elaboración del proyecto de presupuesto de la institución desde agosto pasado.
En 2021, para la aprobación del presupuesto del presente año pasó lo mismo. “Se nos pasó aprobar un presupuesto de la Asamblea que era una página en blanco (en diciembre 2021). No lo conocimos y no lo conocemos actualmente”, manifestó Claudia Ortiz, del partido VAMOS anteriormente.
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Pero en el dictamen que fue aprobado este jueves, se recalca que dicho proyecto de presupuesto y sistema de salarios de la Asamblea para 2023, ha sido elaborado de acuerdo con los principios de eficiencia, racionalidad y transparencia”.
Esto fue recalcado por la diputada Suecy Callejas, de Nuevas Ideas, en el pleno. Según dijo, el gasto legislativo refleja una disminución de $3 millones en comparación con el presupuesto de legislaturas anteriores.
Aseveró que esa disminución se debe a que eliminaron plazas fantasmas. "Todas las personas que encontrarán dentro de la Ley de Salarios de esta institución están efectivamente trabajando y existen", acotó Callejas.
Sin embargo, la Ley de Salarios de la Asamblea no ha sido pública, en tanto se desconoce en realidad cuántos empleados tiene el Órgano Legislativo.
La denuncia del Sindicato de Trabajadores de la Asamblea (SITRAL) es que la Junta Directiva ha despedido a decenas de empleados desde mayo de 2021, para contratar a personas afines al partido oficialista y al gobierno.
En el dictamen se establece que la cantidad aprobada fue consultada con el presidente de la República, Nayib Bukele, para garantizar que existan los fondos necesarios para su ejecución. La respuesta del mandatario fue que sí, aseguran.
En el documento se omiten todos los detalles relativos al presupuesto del Órgano Legislativo, entre ellos, el pago de remuneraciones, gastos en viáticos, viajes, adquisición de bienes y servicios, infraestructura, telefonía, gasolina, entre otros.
Además, de la distribución de fondos para cada partido político que tiene representación en la Asamblea y el desglose de asignaciones por cada diputado de la llanura y de los miembros de la Junta Directiva.
Anteriormente, los diputados de oposición cuestionaron que el monto previsto de $57.6 millones para 2023 no refleja la promesa de austeridad que hizo la bancada oficialista desde 2021.
“Es triste e inaceptable que exista tan poca información y apertura sobre detalles del presupuesto de la Asamblea para el año 2023. Lo opaco y oscuro erosiona la confianza ciudadana, aunque hoy quienes ejercen el poder total gocen de apoyo popular. Si estas prácticas se van volviendo normales, será cada vez más difícil hacer valer nuestros derechos”, lamentó en septiembre pasado el diputado Johnny Wright, de Nuestro Tiempo.
El dictamen para el presupuesto de la Asamblea tuvo algunos cambios, según lo que se conoció en la comisión de Hacienda cuando emitió el dictamen favorable hace un par de días, por ejemplo, incrementaron en $700 mil el gasto para la construcción y remodelación de infraestructura legislativa. En 2022 la asignación fue de $300 mil.
“Ellos tanto alarde que hacían en torno al discurso en plena campaña electoral de que se iban a acabar ciertas cosas, son incoherentes porque no lo han hecho. En marzo que se dieron las 11 medidas económicas planteamos que era necesario que todo el Estado incluido el Órgano Legislativo estableciera disposiciones de ahorro”, argumentó la diputada Anabel Belloso en días pasados.