En pocos segundos la vida del motociclista cambió, justo cuando iba a incorporarse a una carretera, en una zona oscura, sin percatarse que iba hacia él un vehículo a excesiva velocidad. La moto fue impactada. Volcó. Giró varias veces y el conductor fue lanzado contra el pavimento.
Los dos meses siguientes, el motociclista los pasó en una Unidad de Cuidados Intensivos. El casco que llevaba puesto impidió una fractura en el cráneo, pero tenía una fractura expuesta en una pierna; es decir el hueso era visible. Pero lo más grave estaba invisible.
En el país el promedio diario de siniestros viales de motociclistas, entre enero y el 21 de marzo ha sido de 10. Y representa un alza respecto al año pasado, cuando el promedio era de ocho.
Más allá de la escena inicial del lesionado tirado en la escena del accidente; la lucha por la vida del conductor , frecuentemente, se intensifica en los hospitales. El doctor Emilio Salazar fue uno de los médicos que atendió al motociclista del que se hace referencia al inicio del texto, en la emergencia de un hospital.
Según los datos oficiales, en lo que va del año, el promedio diario de atención de lesionados en siniestros o accidentes viales ha sido de 35; esto sería como estar recibiendo cada 41 minutos un caso.
El médico, con especialidad en Cuidados Intensivos, explica que lo primero que se revisa en los pacientes es cómo están respirando, que no tenga obstrucciones, coágulos en la boca.
“En el caso del motociclista no estaba respirando bien y se intubo, se colocó un tubo y se conectó a una máquina para proveer el oxígeno mientras el cuerpo resuelve lo que lo llevó a esa necesidad”, describe Salazar el protocolo de atención médica inicial.
Luego revisaron su pulso, le hicieron una revisión minuciosa de la cabeza a los pies; una revisión que el personal sanitario hace rápido, en un lapso de uno o dos minutos, para determinar lesiones. También a ese paciente le hicieron otros estudios para determinar lesiones internas, daño en los órganos.
“En el caso del motociclista sí tuvo un sangramiento. Nosotros en el abdomen tenemos órganos sólidos como el hígado, el bazo, y órganos huecos como el estómago, intestino. En un accidente, los órganos sólidos pueden desgarrarse y sangrar, resultado del cambio de velocidad, y la hemorragia no puede ser controlada sino en el quirófano. Además, si un paciente ha comido recientemente, la probabilidad es mayor de que los órganos se rompan, estallen por el cambio de velocidad, por la energía recibida, por el impacto. Este motociclista pasó al quirófano y luego a Cuidados Intensivos, en donde se estabilizaron las funciones del cuerpo”, narró Salazar.
Un paciente con traumatismo severo ha pedido sangre plaquetas, las sustancias de la coagulación. , la sangre se pone ácida, hay pérdidas de agua y sales del cuerpo (sodio potasio magnesio).
En los casos de quienes viajan en moto muchas veces no solo se fractura el hueso, sino que el músculo se lesiona y se rompe a nivel microscópico, lo que libera sustancias tóxicas que se van a depositar al riñón, lo que puede crear un compromiso renal , a eso le llamamos rabdomiolisis, puede llevar falla de órganos; además, como ha perdido líquidos el corazón puede trabajar más para compensar el bajo porcentaje líquido de la sangre (hipovolemia) y eso lo lleva a falla cardiovascular.
El trabajo en Cuidado Intensivo es darle soporte a los órganos.
El médico intensivista agregó que desde que el paciente entra a Cuidados Intensivos, la meta es liberarlo del respirador.
“El motociclista, este paciente en particular, salió bien de la cirugía, la hemorragia se logró controlar, no tenía lesiones de órganos, tenía fractura expuesta de la pierna izquierda. Ortopedia necesitó intervenir en quirófano para reparar la fractura y colocó material de acero para darle buena cicatrización de la pierna, pero al quitarle los medicamentos y luego de corregir los problemas principales, se quitó el sedante pero el paciente no despertó”, dijo el doctor.
Añadió que las tomografías cerebrales iniciales estaban bien, no había fractura de cráneo, no había hemorragia ni coágulos en el cerebro ( isquemia del cerebro), pero el paciente tenía una lesión importante que ocurre cuando el cuerpo rota.
“Al ser impactado por un vehículo, lo empujó y roto , experimentó un giro, hay una lesión difícil de tratar cuando el cuerpo gira. Nuestro cerebro tiene neuronas, que tiene axones. La neurona (el cuerpo celular) pesa más que el axón. Y ocurre por las leyes de la física que cuando algo gira, si pesan diferente no giran a la misma velocidad , aunque sean parte de la misma estructura. Cuando el motociclista giró las neuronas se dividieron en dos, eso produjo una ruptura de las terminaciones nerviosas cerebrales, y esa no se puede ver en las tomografías. Neurona lesionada no hay nada que la pueda reparar”, dijo Salazar.
El médico intensivista dijo que lo que lo llevó a la pérdida de la vida fue la lesión axonal difusa, que ocurre cuando el cuerpo gira sobre su eje y se dañan irreversiblemente la función nerviosa. El paciente pasó alrededor de dos meses en UCI, y aunque el resto de sus órganos se recuperó, sus neuronas no.
En lo que va del año, y según las estadísticas oficiales, 33 de cada 100 lesionados en siniestros viales, atendidos en hospitales, recibieron un diagnóstico de traumatismo múltiple, es decir tenía dos o más órganos afectados, o al menos una lesión que ponía en peligro su vida.
Y 26 de cada 100 pacientes tuvieron golpes en el brazo o pierna.
En total, 1088 personas han sido atendidas este año en los hospitales víctimas de siniestros viales, el 72.43% son hombres, de acuerdo con los datos del Observatorio Vial del Fonat. Incrementan las muertes y lesionados en accidente de tránsito este año en relación al 2023.
