Cada vez que llueve de forma intensa, las calles de la colonia Montelimar, en Olocuilta, se convierten en ríos con un caudal fuerte, según sus habitantes. La noche del domingo 7 de julio ocurrió la inundación más grande que recuerdan sus pobladores. Según cuentan, el agua alcanzó más de dos metros de profundidad y afectó a locales y viviendas aledañas a la zona.
Según Jonathan Sequeira, miembro de la junta directiva de la comunidad, la principal causa de estas inundaciones es la acumulación de basura en los tragantes y desagües de la colonia.
La inundación del pasado domingo fue provocada porque el desagüe principal de la colonia que evacúa el agua lluvia que se moviliza sobre el kilómetro 20 de la autopista a Comalapa estaba tapado, relata Sequeira. Es una tubería de 2 metros de diámetro que, según Jonathan, estaba completamente tapada de basura.
“Esta situación se da desde hace unos 10 o 15 años (acumulación de basura). La falta de conciencia de los vecinos tirando basura, colchones, sillones y tapa la fluidez del agua” relata.
Sandra Vásquez palmea tortillas a un costado de la calle principal de la colonia Montelimar, por las noches ella acostumbra a dejar su plancha y tambos de gas amarrados por un posible robo o, en invierno, una inundación que le deje sin su medio para ganarse la vida.
Cada vez que llueve, Vásquez está atenta a que sus pertenencias del negocio no se las lleve la corriente de agua. La noche del domingo ella recuerda que sus vecinos le decían: “allá están nadando sus tambos de gas”, pero, no podía hacer nada por el alto nivel del agua.
María Isabel es otra comerciante de la colonia quien asegura que desde el cambio de alcaldías se han observado menos integrantes de cuadrillas de limpieza en la colonia. Argumenta que esto ayuda a la obstrucción de los tragantes y desagües.
“Antes pasaban una cuadrilla con 8 personas, ahora se ven 3 personas a lo mucho y no dan abasto” analizó Isabel, quien lamentó también la falta de atención a las problemáticas en la colonia.