Francia y Alemania confirmaron este viernes sus primeros casos de viruela del mono, uniéndose así a varios países de Europa y Norteamérica, donde ya se registraron casos de esta enfermedad oriunda de África central y occidental.
Un primer caso de viruela del mono se registró el jueves en Francia, en un hombre de 29 años que no había viajado a un país donde circula el virus, anunciaron las autoridades sanitarias.
El hombre se encuentra aislado en su domicilio en la región de París y las autoridades identifican a sus contactos para informarles de cómo actuar para limitar la propagación del virus.
Lee también: ¡Alerta sanitaria! Estos son los países donde ya se reportan casos de viruela del mono
El instituto de microbiología de las fuerzas armadas alemanas dijo por su parte haber detectado el virus en un paciente que desarrolló lesiones en la piel, uno de sus síntomas.
🇪🇺 | URGENTE: Bélgica, Francia y Países Bajos reportan casos de la viruela del mono.
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) May 20, 2022
Mientras los casos van en aumento en Europa, este viernes la OMS llamó a una reunión extraordinaria con especialistas sobre la enfermedad en la que se abordará principalmente "cómo el virus se está propagando, la prevalencia inusualmente alta en hombres homosexuales y bisexuales, así como la situación de la vacunación".
A la fecha, la viruela del mono afecta 8 países de Europa, Estados Unidos y Canadá.
Esta es una enfermedad poco común originaria de África. El virus puede transmitirse por el contacto directo con heridas de la piel o membranas mucosas de una persona enferma.
Este también puede transmitirse a través de los fluidos o el contacto con el entorno de la persona enferma, como ropa de cama, ropa, platos, toallas de baño, etc.
Desde el 14 de mayo, se confirmaron casos, sin vínculo directo con un viaje a África, en el Reino Unido, España, Portugal, Bélgica, Suecia e Italia, así como en Estados Unidos y Canadá.
Sus síntomas incluyen fiebre, dolores musculares e inflamación de los ganglios linfáticos, antes de provocar una erupción parecida a la varicela en el rostro y el cuerpo.
La enfermedad, generalmente benigna, se supera al cabo de dos o tres semanas. El virus, que infectó a miles de personas en África central y occidental en los últimos años, no suele ser mortal.