Este sábado la policía de Kenia anunció que encontró más bolsas con restos de mujeres desmembradas en un basural de un arrabal de Nairobi, después de que el hallazgo el viernes de varios cadáveres mutilados generara indignación en el país.
Según la Dirección de Investigaciones Criminales (DCI) de la policía, las tres nuevas bolsas descubiertas podrían contener al menos dos cadáveres de mujeres.
"La primera bolsa contenía dos piernas de la rodilla hacia abajo, la segunda bolsa dos partes de cuerpos, del cuello a la cintura y otro de la cabeza a la cintura, y la tercera un miembro inferior del muslo a la rodilla", añadió.
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Aunque la policía sigue revisando el basural de Mukuru, donde varios cuerpos mutilados fueron encontrados en bolsas plásticas el viernes, bajo la mirada de una muchedumbre indignada por el hallazgo.
"Queremos dar seguridad a la opinión de que nuestras investigaciones serán exhaustivas y cubrirán un amplio abanico de posibilidades, inclusive, pero sin limitarse a las posibles acciones de sectas y de asesinos en serie", agregó la DCI.
Tras abrir una investigación por el hallazgo el viernes de los cadáveres mutilados de seis mujeres en un basurero de una barriada de Nairobi y los agentes dispersaron a una multitud indignada frente a una comisaría cercana.
También "se recibió una alerta tras el descubrimiento de seis cuerpos gravemente mutilados, todos de mujeres, en diversos estados de descomposición", declaró la Dirección de Investigaciones Penales en un comunicado.
Dichos cadáveres estaban envueltos en bolsas de nailon con cuerdas.
Posterior al anuncio, la policía disparó gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a una multitud que se congregó fuera de una comisaría en Mukuru.
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Mientras tanto la Oficina del Director de la Fiscalía expresó su "profunda preocupación" por el hallazgo que, según él, es indicativo de "una grave violación de los derechos humanos, considerando que el vertedero está a pocos metros de la comisaría".
El jefe de la policía de Nairobi, Adamson Bungei, informó a los periodistas que abrió una investigación "para establecer las identidades y la forma en que fueron asesinadas estas personas".
No obstante la policía keniana está siendo investigada por la muerte de decenas de personas durante las protestas contra el gobierno en junio y por los reportes de secuestros de manifestantes.
Un año antes, la opinión pública de Kenia quedó conmocionada por el hallazgo de fosas comunes con cadáveres de cientos de adeptos a una secta que fueron obligados a ayunar hasta la muerte.