Tres empleados de Naciones Unidas en Sudán murieron en la conflictiva región de Darfur, mientras siguen los enfrentamientos entre el ejército y las fuerzas paramilitares, indicó hoy temprano el jefe de la misión de la ONU en el país africano.
"Tres empleados del Programa Mundial de Alimentos murieron en los enfrentamientos que estallaron en Kabkabiya, Darfur del Norte", dijo en un comunicado el representante especial de la ONU, Volker Perthes.
El Programa Mundial de Alimentos anunció además la suspensión de sus operaciones en Sudán, sacudido por enfrentamientos entre ejército y paramilitares, tras la muerte ayer de tres empleados que trabajaban para esta agencia especializada de Naciones Unidas.
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"Nos vemos obligados a suspender temporalmente todas nuestras operaciones en Sudán, mientras analizamos la evolución de la situación de la seguridad", indicó en un comunicado la directora del organismo, Cindy McCain.
Los tres cooperantes murieron en la región occidental de Darfur el sábado "mientras llevaban a cabo sus labores para salvar vidas en primera línea de la crisis alimentaria mundial", añadió McCain.
"Todas las partes deben llegar a un acuerdo que garantice la seguridad de los trabajadores humanitarios sobre el terreno y permita seguir prestando ayuda humanitaria para salvar vidas", enfatizó.
Sudán vive hoy, por segundo día consecutivo, enfrentamientos entre el ejército y paramilitares que se disputan el poder tras el golpe de 2021.
Al menos 56 civiles han perdido la vidas, incluyendo los tres empleados de esta agencia, según el Comité Central de Médicos de Sudán.
Corredor humanitario
El ejército y los paramilitares que desde el sábado pasado se enfrentan en Sudán anunciaron la apertura de corredores humanitarios hoy, durante tres horas, para poder evacuar a los heridos.
Ambas partes puntualizaron que se reservan el "derecho de responder en caso de vulneración" del acuerdo.