Minutos antes de la tragedia, Jayro Vargas sintió un fuerte ventarrón sacudir la aeronave. Lo siguiente fue un impacto devastador. Vargas, uno de los sobrevivientes del accidente aéreo en Roatán que dejó al menos 13 muertos, solo pudo repetir una y otra vez la misma frase tras ser rescatado, según relata el medio hondureño La Prensa.
El bimotor JetStream 32 de la aerolínea Lanhsa cayó al mar el pasado lunes a las 18:15 hora local, poco después de despegar del Aeropuerto Internacional Juan Manuel Gálvez con destino a La Ceiba. Según el capitán Borjas, del Cuerpo de Bomberos, la aeronave presentó problemas en uno de sus motores, lo que habría provocado su desplome.
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Aún en estado de ‘shock’, Vargas no pudo brindar muchos detalles, pero confirmó que sintió un ventarrón antes del accidente. El impacto partió el avión en dos, dejando restos flotando en el mar, de acuerdo al relato de dos pescadores que rescataron a 4 sobrevivientes.
Uno de ellos, el pescador Manuel Aldair Alemán fue uno de los primeros en llegar al lugar del siniestro. “Había muebles, cuerpos y heridos flotando. Solo pedían que los sacáramos del agua, estaban aterrados”, relató Alemán y consigna La Prensa de Honduras. Él y otro pescador rescataron a cuatro sobrevivientes.
Vargas viajaba a La Ceiba para asistir al velatorio y sepultura de su hija, pero en el accidente perdió a su pareja actual. Entre las víctimas también se encontraba el reconocido cantautor garífuna Aurelio Martínez.
Según la directora del Hospital de Roatán, Ruth Cacho, Vargas fue el único de los sobrevivientes que intentó hablar, pero la conmoción le impidió dar detalles. Mientras tanto, las autoridades han iniciado investigaciones para determinar las causas exactas del accidente, aunque se sospecha que el mal mantenimiento de la aeronave pudo haber sido un factor clave.
Ayer martes, buzos de la Fuerza Naval recuperaron el cuerpo de la última víctima, una mujer, sumergida entre los escombros del avión. Los restos de los fallecidos han sido trasladados a Medicina Forense en San Pedro Sula para su identificación y entrega a familiares.