Daniel Ortega dio este lunes por rotas las relaciones con Brasil, y tildó a su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, de "arrastrado" y de querer ser el "representante de los yanquis" en América Latina.
Durante una cumbre virtual con jefes de Estado de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), Ortega criticó a Lula por su posición crítica sobre el cuestionado resultado de los comicios celebrados el 28 julio en Venezuela.
El dirigente sandinista dijo que Lula es uno de los presidentes de América Latina que ha tenido una "reacción brutal" y "cobarde" por no reconocer a Maduro, y que forma parte de los "Gobiernos serviles, traidores, arrastrados".
Ortega dijo que Lula "de una forma vergonzosa" anda "repitiendo las consignas de los yanquis y de los europeos, y de los Gobiernos arrastrados de América Latina".
"¡Te estás arrastrando también, Lula! ¡Te estás arrastrando, Lula!", exclamó Ortega, que también criticó la anterior gestión de Gobierno del mandatario brasileño. Recordó que en su primera Administración estallaron "alborotos" de corrupción como "los escándalos Lava Jato". "Acordate bien de todo eso (...). Aparentemente no fue un Gobierno muy claro, muy limpio. Acordate Lula y te podría mencionar una docena de cosas más", continuó.
El pasado 8 de agosto, el embajador de Brasil en Nicaragua, Breno de Souza Brasil Días da Costa, salió del país tras ser expulsado por el régimen de Ortega, de acuerdo con la versión oficial, por no asistir al acto de celebración del 45 aniversario de la revolución sandinista el pasado 19 de julio.
En reciprocidad, el Gobierno de Brasil decidió expulsar a la embajadora de Nicaragua, Fulvia Castro.
Lula ha tenido en el pasado una estrecha relación con Ortega desde 1980, cuando el brasileño viajó a Managua para el primer aniversario de la revolución sandinista, una ocasión en la que además conoció personalmente al cubano Fidel Castro. En los últimos meses, sin embargo, la relación se ha deteriorado, sobre todo debido a la "persecución política" que el régimen de Managua mantiene sobre antiguos sandinistas y religiosos.
El propio Lula explicó la situación el mes pasado, en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros en Brasilia, en la cual reveló que Ortega no le atiende el teléfono desde que el papa Francisco le pidió que abogue por la situación de un obispo detenido en Nicaragua.
Al respecto, Ortega confirmo que no le respondió la llamada a Lula porque para recibir un mensaje del Vaticano, el cual dijo es un Estado "a favor del imperio", la Santa Sede podía comunicarse directamente con él. "No necesitamos intermediarios. No le pedimos a Lula que fuera intermediario. No le respondimos a Lula y él se molestó", indicó.
Lula lamentó que eso ocurra con "un tipo que hizo una revolución como la que Ortega hizo para derrotar a (Anastasio) Somoza" Debayle, en 1979, y dijo que hoy no sabe "si esa revolución fue porque quería el poder o porque quería mejorar la vida de su pueblo".
Al respecto, Ortega dijo que si él es dictador, Lula también lo es: "Qué te podría decir Lula, ya que vos lo has hablado esto públicamente, y ¿vos cuántos periodos lleva ya de Gobierno?. Ya dos periodos de Gobierno. Es decir, parece que te gusta ser presidente". "Y desde esa presidencia de ese gran país, que es Brasil, querés convertirte en representante de los yanquis en América Latina", añadió.