Luego de la masacre que cobró la vida de 21 personas en el interior de un aula de clases en Uvalde, una pequeña comunidad de Texas, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su esposa Jill Biden visitaron el lugar.
Posterior al brutal tiroteo la población a nivel internacional se ha visto consternada debido a los desgarradores testimonios de los niños que sobrevivieron al ataque. En su discurso el mandatario instó a actuar para prevenir futuras masacres en un país donde los esfuerzos para endurecer las regulaciones de armas de fuego han fracasado repetidamente.
"No se puede hacer que los dramas sean ilegales, lo sé. Pero se puede hacer que Estados Unidos sea más seguro", expresó Joe Biden en un discurso el sábado, lamentando que "tantas personas inocentes hayan muerto".
"Así que hago un llamado a todos los estadounidenses en este momento para que se unan y hagan oír sus voces y trabajen juntos para hacer de esta nación lo que puede y debe ser", recalcó el presidente.
Previo al discurso los inquietantes testimonios de las víctimas han generado indignación debido a la forma en la que Salvador Ramos, de 18 años abrió fuego con un rifle semiautomático.
Según los menores Ramos ingresó a un aula, cerró la puerta y se dirigió a los niños: "Vais a morir todos", gritó antes de abrir fuego, relató un sobreviviente, Samuel Salinas, de 10 años, al canal ABC.
Actualmente la policía admitió haber tomado una "decisión errónea" al demorar su ingreso al centro educativo tras ser alertada del tiroteo.
Controlar la masacre y detener al tirador tardó aproximadamente una hora para que las autoridades tomaran el control. Los 19 agentes que se encontraban en el lugar esperaban la llegada de una unidad especializada.
Texas Gov. Greg Abbott met with boos from locals at the Robb Elementary School memorial in #Uvalde pic.twitter.com/Gz5EemXMDG
— philip lewis (@Phil_Lewis_) May 29, 2022
"Nadie gritó"
Los sobrevivientes del ataque dijeron haber realizado llamadas susurradas y suplicantes al 911. Algunos se hicieron los muertos para evitar llamar la atención del tirador.
Samuel Salinas de los niños que logró tirarse al piso para simular su muerte.
Lo mismo hizo Miah Cerrillo, de 11 años, para escapar de la atención de Salvador Ramos. La niña se cubrió con la sangre de un compañero, cuyo cadáver estaba junto a ella, dijo a la cadena CNN fuera de cámaras.
Finalmente las autoridades detuvieron el drama al romper una de las ventanas de su salón de clases ingresar y ultimar a tiros a Ramos.
La solidaridad
Desde el miércoles, vecinos de esta pequeña ciudad y de otras localidades acuden a todas horas al memorial improvisado con 21 cruces de madera blancas instaladas en la plaza con el nombre de 19 niños y dos maestras muertos.
Los asistentes, en silencio, forman un círculo en torno al memorial, se dan las manos y rezan. Muchos llevan ofrendas florales, peluches y velas para honrar a los fallecidos.