Navíos militares rusos atracados en la bahía de Sebastopol, en la península de Crimea, en una imagen de archivo. EFE/Sergei Ilnitsky
Rusia protestó este lunes ante la embajadora de Estados Unidos, Lynn Trace, por el empleo de misiles ATACMS con bombas de racimo en el ataque ucraniano perpetrado el domingo contra el puerto crimeo de Sebastopol que se saldó con cuatro civiles muertos.
“Estados Unidos (…) carga con la misma responsabilidad que el régimen de Kiev por este malvado acto”, denunció el Ministerio de Exteriores ruso en un comunicado.
Según la diplomacia rusa, EE.UU. “lleva a cabo una guerra híbrida contra Rusia y se ha convertido en parte del conflicto al suministrar al Ejército ucraniano el armamento más moderno, incluyendo los misiles ATACMS con bombas de racimo utilizados contra la población de Sebastopol”.
También denunció que “la elección de los objetivos y la creación de las misiones de vuelos (de los misiles) es llevada a cabo por especialistas militares estadounidenses”.
Moscú anuncia una respuesta al ataque
Exteriores declaró a la embajadora de que “estas acciones de Washington, que tienen el fin de alentar a las autoridades pronazis de Ucrania a continuar las acciones bélicas hasta el último ucraniano, al permitir atacar territorio ruso, no quedarán impunes”.
“Responderemos sin falta”, advirtió la diplomacia rusa.
Este domingo, las fuerzas ucranianas lanzaron cinco misiles ATACMS contra Sebastopol, base de la Flota rusa del Mar Negro, cuatro de los cuales fueron derribados por las defensas antiaéreas rusas.
El quinto se desvió de su rumbo, según Defensa, y explotó sobre el litoral de la península, matando a cuatro civiles e hiriendo a más de 150.
Según los canales de Telegram, un misil estalló en una playa en la que descansaba el domingo gran cantidad de gente, aprovechando el calor estival.
El Ministerio de Defensa de Rusia responsabilizó inmediatamente a Washington del ataque por suministrar a Kiev los misiles ATACMS lanzados por el Ejercito ucraniano y autorizar su uso contra territorio ruso.
Sin autorización para usar misiles de largo alcance
“La responsabilidad por este ataque de misiles deliberado contra la población civil de Sebastopol recae ante todo en Washington, que suministró estas armas a Ucrania, y también el régimen de Kiev, desde cuyo territorio fue lanzado este ataque”, señaló en Telegram.
El Gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, dio permiso a Ucrania a fines de mayo para atacar objetivos en territorio de Rusia utilizando armas proporcionadas por Estados Unidos, pero sólo si se trataba de objetivos militares en la zona fronteriza rusa cerca del área de la región nororiental de Járkov.
Sin embargo, esta autorización, según confirmó a EFE un funcionario estadounidense, no se extiende a misiles de largo alcance como el Sistema de Misiles Tácticos del Ejército conocido como ATACMS y utilizado el domingo en Sebastopol, según las autoridades rusas.
Kiev dice que Crimea es una zona de guerra
El consejero de la oficina presidencial ucraniana Mijailo Podoliak señaló hoy, a propósito de la muerte este domingo de cuatro civiles en un ataque ucraniano contra Crimea, que la península es “un territorio extranjero (para los rusos) ocupado por Rusia en el que hay hostilidades y una guerra a gran escala”.
“No hay ni puede haber ‘playas’, ‘zonas turísticas’ y otros signos ficticios de ‘vida pacífica’ en Crimea. Crimea es definitivamente un territorio extranjero ocupado por Rusia, donde hay hostilidades y una guerra a gran escala. La misma guerra que Rusia desató con propósitos genocidas e invasores”, escribió Podoliak en su cuenta de la red social X.
El consejero de la presidencia ucraniana agregó que “Crimea es también un gran campamento y almacén militar con centenares de objetivos militares directos que los rusos intentan esconder y cubrir cínicamente con sus propios civiles”.