El Ejército israelí ha desmantelado la estructura de túneles de Hamás en el norte de la Franja de Gaza, con Yabalia como centro, donde han encontrado cuerpos de cinco rehenes que ya se habían confirmado muertos.
“En las últimas semanas, la 551.ª Brigada de la 162.ª División aseguró el control de la zona del campamento de Yabalia, uno de los centros operativos de Hamás en la Franja de Gaza”, indicó un comunicado castrense.
Las operaciones incluyeron “feroces batallas” durante las cuales “muchos terroristas fueron asesinados por soldados” y se localizaron cientos de armas, informó el portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari.
Los cuerpos que se hallaron corresponden a los de tres soldados que fueron hechos cautivos el 7 de octubre, Ziv Dado, Ron Sherman y Nick Beiser, además de los civiles Eden Zacharias y Elia Toledano.
Egipto propuso al grupo islamista Hamás una tregua de “dos o tres semanas” a cambio de la liberación de 40 rehenes israelíes, como parte de un plan tripartito para alcanzar el cese total de la guerra en la Franja de Gaza, informaron fuentes palestinas a EFE.
Según las fuentes, la delegación de Hamás viajará a Catar, donde se encuentra su oficina política, para valorar los detalles de esta propuesta que Egipto presentará también a la delegación de la Yihad Islámica, encabezada por su secretario general, Ziad Najalah, que llegó este domingo a El Cairo para abordar la situación en el enclave palestino.
Mahmud Abás pide el fin del “río de sangre” del pueblo palestino
El presidente palestino, Mahmud Abás, pidió este domingo el fin del “rio de sangre” y de los “inmensos sacrificios” del pueblo palestino en un mensaje de felicitación de Navidad, celebración que cobra especial relevancia en Belén, donde la tradición cristiana ubica el nacimiento de Jesús.
“El río de sangre, los inmensos sacrificios, las penurias y la heroica resiliencia de nuestro pueblo en su tierra son el camino hacia la libertad y la dignidad”, afirmó el presidente de la Autoridad Palestina, que gobierna zonas reducidas de Cisjordania ocupada.
Cada 24 de diciembre, Belén -centro de la comunidad cristiana palestina- celebra un tradicional desfile con bandas de música, previo a la llegada del Patriarca Latino de Jerusalén a pie para oficiar una misa en la Iglesia de Santa Catalina, la parte católica basílica de la Natividad.
Pero este año, el patriarca Pierbattista Pizzaballa -el enviado religioso del Vaticano a Tierra Santa- llegará a Belén en una procesión solemne, sin música ni actos festivos, de luto por el alto número de muertos palestinos en la guerra en la Franja de Gaza, que superan los 20.200 mientras prosigue la ofensiva israelí.
Cisjordania ocupada también ha vivido su año más mortífero desde 2002, el pico de violencia de la Segunda Intifada, con unos 510 muertos, más de la mitad desde el 7 de octubre, cuando comenzó la guerra en el enclave.
Abás expresó este día de Nohebuena su esperanza de que esta Navidad marque el cese de la guerra israelí contra el pueblo palestino en Gaza y el resto de territorios palestinos ocupados, deseando “prosperidad y estabilidad para el pueblo palestino y todas las naciones”.