Los guatemaltecos elegirán este domingo un nuevo presidente en unos comicios cuestionados tras la exclusión de candidatos y la persecución de periodistas y exfiscales anticorrupción.
Unos 9.4 millones de guatemaltecos están habilitados para elegir al sucesor del mandatario derechista Alejandro Giammattei, tildado de "autoritario" y reprobado por el 75% de los ciudadanos, según encuestas, en un país con altos índices de violencia, corrupción y pobreza.
La ex primera dama socialdemócrata Sandra Torres encabeza la intención de voto (21,3%), seguida por el exdiplomático centrista Edmond Mulet (13,4%), según la última encuesta de la firma ProDatos. En tercer lugar (9,1%) figura la derechista Zury Ríos, hija del fallecido exdictador militar Efraín Ríos Montt (1982-1983), y cuarto el oficialista Manuel Conde (5,8%).
Este sondeo sugiere que habrá balotaje el 20 de agosto pues ningún candidato sobrepasaría el 50% más un voto para ganar la presidencia en primera vuelta.
Hay 22 aspirantes presidenciales en los comicios, algo común en Guatemala, en los que además serán elegidos 160 diputados, 340 alcaldes y 20 representantes al Parlamento Centroamericano. El voto es voluntario y está prohibida la reelección.
Ninguno de los cuatro principales candidatos promueve legalizar los matrimonios igualitarios ni el aborto, que solo está permitido si hay riesgo para la madre.
Votación en EE.UU.
Los centros de votación abrirán a las 07H00 locales (13H00 GMT) y cerrarán a las 18H00 (00H00 GMT). Los primeros escrutinios oficiales se conocerán unas tres horas después. Desde el mediodía del sábado habrá ley seca por 42 horas.
Funcionarán casi 3.500 centros de votación en las costas del Caribe habitadas principalmente por la etnia garífuna, la zona selvática de monumentos mayas de Petén fronteriza con México y Belice, el altiplano del occidente o la capital en el centro del país.
También habrá centros de sufragio en 15 ciudades de Estados Unidos, donde viven 2,8 millones de guatemaltecos, aunque solo 90.000 están registrados para votar.
Las críticas por la falta de transparencia del Tribunal Supremo Electoral (TSE), de cinco magistrados, ha provocado desconfianza y desinterés entre la ciudadanía, lo que explicaría el aumento de quienes van a votar nulo a un récord de 13,5%, según el sondeo de ProDatos. En la primera vuelta de 2019 los nulos fueron 4,1%
"Todos los candidatos son lo mismo y solo llegan a robar. Todavía no sé si voy a ir a votar", dijo a la AFP Néstor Figueroa, un vendedor ambulante de accesorios de automóviles en la periferia sur de la capital.
El empresario derechista Carlos Pineda y la líder indígena de izquierda Thelma Cabrera fueron excluidos de la contienda por la justicia y el TSE, respectivamente.
"Modelo Nicaragua"
Analistas, oenegés, líderes indígenas y el candidato Mulet han alzado sus voces ante lo que consideran un creciente control de las instituciones del Estado por parte de sectores poderosos políticos y empresariales, con el fin de mantener la corrupción y la impunidad.
Bajo el mandato de Giammattei fueron detenidos una decena de exfiscales que trabajaron con la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un ente de la ONU que operaba como fiscalía paralela y que destapó sonados casos de corrupción entre 2007 y 2019.
Además, el fundador de un diario crítico del gobierno, José Rubén Zamora, fue condenado este mes a seis años de prisión por lavado de dinero, en un juicio denunciado por organizaciones internacionales de prensa. Su rotativo dejó de publicarse el 15 de mayo.
"Todas las instituciones del Estado, incluso el proceso electoral, está siendo manipulado por grupos de poder vinculados a la corrupción y el poder tradicional oligarca", afirmó a la AFP Edie Cux, director del capítulo local de la ONG Transparencia Internacional.
En estas elecciones está en juego "el Estado de derecho, la democracia y todas las garantías y libertades para toda la población", advirtió.
"Vamos deslizándonos poco a poco a un modelo autoritario. No digo de dictadura por el momento, pero sí autoritario, modelo Nicaragua, por ejemplo", aseguró Mulet, abogado de 72 años que ocupó altos cargos en la ONU.
10 millones de pobres
Guatemala es uno de los países más desiguales de América Latina, según el Banco Mundial, donde 10,3 millones de sus 17,6 millones de habitantes viven en la pobreza y uno de cada dos niños de menos de cinco años sufre desnutrición crónica, de acuerdo a la ONU.
Otro problema agobiante es la inseguridad: la tasa de homicidios es de 17,3 por cada 100.000 habitantes en Guatemala, el triple del promedio mundial, según la ONU.
La pobreza y la violencia impulsan a miles de guatemaltecos a emigrar a Estados Unidos. Las remesas que envían a sus familias, 18.000 millones de dólares en 2022, representan el 19% del PIB nacional.