El expresidente estadounidense Jimmy Carter falleció a los 100 años, confirmó su familia al periódico The Washington Post.
Carter, que se encontraba en su hogar en cuidados paliativos y votó en las pasadas elecciones, había recibido tratamiento por una forma agresiva de cáncer de piel tipo melanoma, con tumores que se habían extendido al hígado y al cerebro.
Militante demócrata, vivió más tiempo después de su mandato que cualquier otro presidente estadounidense. Fue senador de Georgia y se mantuvo en la presidencia de Estados Unidos entre el 20 de enero de 1977 y el 20 de enero de 1981.
Devoto creyente bautista, James Earl Carter Jr nació en 1924 en Plains, Georgia. Su familia era la única blanca en medio de un vecindario afroamericano en plena época de la segregación.
Ingresó a la prestigiosa Academia Naval de Annapolis, Maryland, de donde se graduó como alférez y luego fue ascendido a teniente en primer grado. Pero en lugar de seguir en la Marina, dedicó gran parte de su juventud a reconstruir la producción de la granja de maní que había heredado de su padre, la cual era apenas rentable tras el pago de deudas y la división de bienes.
Residió con su esposa Rosalynn y sus tres hijos en una vivienda subsidiada para pobres.
En la década de 1970, asumió en su campaña para gobernador de Georgia una postura conservadora frente a la segregación porque sabía que de otra manera sería difícil que lo eligieran. Sin embargo, ya en la gobernación se declaró a favor de los derechos civiles e implementó medidas en contra de la segregación racial.
Carter asumió el poder en enero de 1977, tras haber derrotado en una apretada contienda al presidente y candidato republicano Gerald Ford. El nuevo presidente nombró a más negros y latinos en su gabinete que todos sus antecesores.
Su mediación posibilitó en septiembre de 1978 los acuerdos de paz de Camp David entre Israel y Egipto, que prácticamente comandaba a las naciones árabes que en varias ocasiones intentaron invadir y acabar con el naciente Estado.
La administración Carter se basó en su política de "derechos humanos", que fue aprovechada para destronar regímenes de derecha en Oriente Medio, entre ellos del del Sha en Irán, y propició el ascenso de dictaduras de socializantes en Latinoamérica, como la de los sandinistas en Nicaragua.
La caída de Irán en manos de una teocracia de ayatolas en 1979 llevó a país de ser prooccidental a practicar la ley musulmana.
Los musulmanes integristas, que decían ser "estudiantes", se tomaron la embajada de Estados Unidos con 52 personas y no permitieron su liberación hasta 444 días después. La teocracia iraní comenzó entonces a apoyar a movimientos terroristas que posteriormente dieron a vida a grupos como el actual Hezbolá.
Por la misma política de derechos humanos el régimen de Anastasio Somoza fue abandonado a su suerte y ascendieron los sandinistas, que al principio simularon querer plena democracia pero luego fueron expulsando del gobierno a los demócratas y en 1980 entronizaron un régimen socialista en el que llegó a escasear de todo y la moneda nacional, el córdoba, no llegó a valer nada. No obstante, apoyaron a guerrillas izquierdistas en Guatemala y El Salvador y fracasaron en el intento en Honduras.
En el ámbito de las relaciones exteriores, Carter firmó un tratado de reducción de armas nucleares con la entonces Unión Soviética y devolvió el Canal de Panamá a ese país centroamericano.
La crisis de los rehenes y erradas políticas económicas no le permitieron reelegirse frente al republicano Ronald Reagan, por lo que se retiró de la política. En 1982 fundó con su esposa Rosalynn el Centro Carter, con el propósito de "combatir la enfermedad, hambre, pobreza, opresión y conflicto" a nivel global y observar el respeto a los derechos humanos y procesos electorales.
El tema de los derechos humanos, igualdad y protección ambiental le valió galardones como el Premio Nobel de la Paz en 2002.
NOTICIA EN DESARROLLO