Este jueves 18 de agosto se encontró en el barrio Friedrichshain una bomba de la Segunda Guerra Mundial, obligando a que se estableciera una zona de exclusión de unos 500 metros donde se evacuó a 12,000 ciudadanos alemanes.
Las autoridades se presentaron en el lugar con el objetivo de desactivarla y evitar riesgos.
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“Podría haber hasta 12.000 personas en la zona de exclusión y llevará tiempo”, explicó una portavoz de la policía.
Una vez que se desactive la bomba será llevada al sitio de detonación de Grunewald, un lugar ubicado en Berlín y donde se almacenan diversos restos de aparatos explosivos.
Alemania encuentra este tipo de artefactos con cierta frecuencia, la última vez ocurrió el año pasado cuando una bomba encontrada en unas obras de Múnich dejó tres heridos tras explotar.
En 2020 se desactivaron siete bombas de la Segunda Guerra Mundial, ubicadas en la planta del fabricante de vehículos Tesla, en las afueras de Berlín.
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La Alemania de la Segunda Guerra Mundial hundió grandes cantidades de municiones para que no cayeran en manos de los aliados, además de que otros artefactos fueron desechados al mar por orden de las potencias vencedoras.