Tras la recuperación del control en territorios usurpados por el ejercito ruso, las autoridades ucranianas han revelado un atroz descubrimiento en la ciudad de Bozova, a las afueras de Kiev, donde decenas de cadáveres fueron encontrados en una nueva fosa común.
Los cuerpos encontrados en las calles, alcantarillados y en una nueva fosa común pertenecen a civiles que habrían sido abatidos a tiros por militares al servicio del Kremlin.
"En la comunidad hay 14 pueblos, algunos de los cuales estaban bajo ocupación. Ahora estamos regresando a la vida. pero durante la ocupación tuvimos nuestros 'puntos calientes', murieron muchos civiles" señaló el presidente de la comunidad de Dmitrov, Taras Didych, en televisión local.
Según indicó a la cadena de noticias EFE "Cerca de la gasolinera de Buzova hemos encontrado más muertos en una fosa” a aparentemente todos son civiles.
Mientras las autoridades trabajan en reestablecer los servicios locales como luz y gas, los civiles trabajan en la remoción de escombros de las calles desoladas.
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Ucrania contabilizó 1.200 civiles asesinados
Con pocas horas de diferencia la fiscal general de Ucrania, Irina Venediktova, detalló este domingo que se han encontrado más de 1,222 cadáveres en los alrededores de la capital, Kiev, principalmente en las zonas que estuvieron ocupadas por las fuerzas rusas.
“Tenemos hasta ahora 1.222 muertos sólo en la región de Kiev”, sostuvo Venediktova, en una entrevista en inglés con la cadena británica Sky News.
Del número de víctimas antes mencionadas hay 5.600 casos de incidentes bajo investigación, debido a que fueron clasificados como crímenes de guerra desde la invasión el pasado 24 de febrero.
Recientemente la comunidad de Bucha, al noreste de Kiev, se convirtió en el símbolo de los horrores de la guerra en Ucrania con cerca de 300 personas enterradas en fosas comunes, según el balance establecido hasta el 2 de abril.