El Gobierno español concedió este martes la nacionalización a otros quince opositores nicaragüenses que fueron despojados de su nacionalidad por el Ejecutivo de Daniel Ortega.
Estos quince opositores se suman así a los catorce que obtuvieron la nacionalidad española hace unas semanas, como parte de un proceso para acoger a nicaragüenses a los que Ortega declaró apátridas por supuestos actos de "traición a la patria".
Fuentes gubernamentales informaron a Efe de que las aprobadas este martes forman parte de un proceso "que sigue su curso" y resultará en más nacionalizaciones a lo largo de las próximas semanas.
El Gobierno de Ortega expulsó y despojó de su nacionalidad el pasado febrero a 222 diplomáticos, exfuncionarios de Estado, defensores de derechos humanos, disidentes sandinistas, opositores, periodistas, académicos, estudiantes, empresarios y comerciantes, entre otros, a los que se sumaron otras 94 expulsiones en marzo.
España ofreció la nacionalidad a todos ellos, además de a otros opositores aún encarcelados en Nicaragua, una oferta que a finales del pasado marzo habían aceptado 81 de ellos.
Entre los primeros catorce a los que se concedió la nacionalidad figuran el periodista Carlos Fernando Chamorro y su hermana Cristiana Chamorro, política opositora, defensores de derechos humanos como Álvaro Leiva, Gertrudis Guerrero, esposa del escritor Sergio Ramírez, y el documentalista Camilo de Castro Belli, hijo de la novelista Gioconda Belli, el sacerdote Carlos Zeledón Montenegro y Álvaro Somoza, sobrino del dictador Anastasio Somoza.