Corea del Norte estableció un nuevo récord en 2022, al lanzar más de 95 misiles balísticos y de crucero. ¿Cómo hace para costear esta operación militar, cuando el régimen de Kim Jong Un pasa apuros para alimentar a su población?
Una solución ha sido el robo de criptomoneda a través de piratas informáticos, una operación de la que El Salvador debería tomar nota, considerando que el Bitcoin fue declarado moneda nacional junto al dólar desde 2021 por el gobierno de Nayib Bukele.
En El Salvador, la adopción del Bitcoin como moneda ha tenido una serie de tropiezos, entre ellos el mal funcionamiento de la criptocartera gubernamental Chivo Wallet, denunciado por cientos de usuarios; así mismo, expertos en el área señalan que la divisa virtual no ha sido bien recibida en el mercado, ni por usuarios ni por establecimientos, y en cambio ha dado lugar a fraudes millonarios.
Según un informe publicado por la empresa de datos Chainalysis, en Nueva York, los "hackers" norcoreanos robaron la cifra récord de 1.700 millones de dólares durante 2022.
Solo en marzo de 2022, los informáticos de Corea del Norte se hicieron con más de 600 millones de dólares, a través de un puente de cadena cruzada, "un método para mover criptomonedas de la cadena de bloques de una moneda a otra, asociado al juego Axie Infinity", detalló el portal Infobae.com.
Para no dejar huellas de los robos de criptodivisa, "los piratas informáticos norcoreanos emplean todo tipo de trucos", publicó el mismo sitio informativo, por ejemplo mover los montos entre criptocarteras y convertirlos en diferentes monedas, fondos que luego son colocados en "mezcladores", que son "grandes fondos digitales donde los propietarios de criptomonedas pueden depositar fondos para ocultar su origen".
Los movimientos oscuros de Corea del Norte ya dispararon las alarmas en Estados Unidos, que ya puso en su lista negra de criptocarteras a Blender.io, mezclador para el pirateo de Axie Infinity.
En Noruega, sus autoridades lograron recuperar 5.8 millones de dólares de cyber-hurtos hechos por "hackers" norcoreanos.
Pero, en general, los países deberían tomar medidas más severas, según explicó Allison Owen, del Royal United Services Institute, un tanque de pensamiento ubicado en Londres, Inglaterra.
"La mayoría de los hackeos comienzan con ataques de phishing relativamente poco sofisticados. Una mejor regulación del sector y la ciberhigiene podrían ayudar a prevenirlos", explicó Owen.