Andressa Souza, una joven de 20 años, perdió la vida trágicamente luego de hacerse una perforación en el labio, la mujer pagó $10 dólares por el servicio que se infectó y le dañó el cerebro de forma irreversible.
El desafortunado incidente se registró en Brasil, donde la madre de la joven señaló que Andresa pasó 24 días ingresada en cuidados intensivos en un hospital local, donde la joven fue intervenida quirúrgicamente.
María Aparecida da Silva Oliveira, madre de la víctima, dijo a los medios locales que la perforación desarrolló una infección, misma que llegó al cerebro a través de la sangre.
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“Vimos que tenía la boca muy hinchada, no había manera de moverla. Estaba tan hinchada que no había manera de sacar el piercing”, dijo la madre a la prensa y detalló “Se le hicieron varias pruebas y luego el médico descubrió, según le transmitieron a mi yerno, que habría sido por el piercing que llevaba”.
La infección viajó por el torrente sanguíneo y se alojó en el cerebro, afectando el 37% de este, detallaron los familiares.
Souza se había colocado el piercing dos meses antes de enfermar. “No sé si fue en algún lugar especializado. No me mencionó nada sobre si la persona era un profesional”, dijo da Silva Oliveira, sobre su hija quien estaba casada y tenía un niño de tres años.
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“Con lo pequeño que es, vio a su madre en esa situación. Es muy difícil para él. Si es difícil para nosotros que somos adultos, imagina para él que es un niño, un bebé, que acaba de empezar su vida”, concluyó.
Ante lo ocurrido, Medical News Today, hizo referencia, si se infecta una nueva perforación, lo más recomendable es no quitarse el arete. Debido a que la perforación puede permitir que la herida se cierra, pero la infección continúa dentro de la piel.
Estas heridas abiertas pueden tardar varias semanas en sanar por completo. Por eso es fácil que una bacteria entre por la herida provocando una infección.